Algunos remedios caseros, como las compresas frías, el bicarbonato de sodio, la solución salina y la manzanilla, ayudan a calmar el enrojecimiento, la comezón y el ardor que causa la alergia al acrílico. Sin embargo, lo primero que debes hacer es evitar la exposición al material.
Es posible que te des cuenta de que padeces la reacción durante o después de colocarte uñas acrílicas. En personas con sensibilidad, componentes como el metacrilato de metilo (MMA) o el etil metacrilato (EMA) —presentes en el monómero líquido y en el polvo acrílico— causan una forma de dermatitis de contacto que afecta la piel que rodea el lecho o la placa de la uña.
En consulta, el dermatólogo suele recetar hidrocortisona tópica y antihistamínicos orales para un alivio rápido y efectivo de los síntomas. Adicional a ello, y mientras buscas atención, puedes recurrir a las siguientes alternativas para reducir el malestar causado por la alergia. ¡Toma nota!
1. Compresas frías
Si el contacto con el acrilato utilizado en manicura acrílica provoca inflamación y ardor en los alrededores de las uñas o en las yemas de los dedos, puedes aplicarte compresas frías para proporcionar alivio.
El frío adormece de forma temporal las terminaciones nerviosas de la piel. De este modo, reduce la hinchazón y la irritación. Además, como calma la comezón, evita que te rasques y dañes la piel.
Instrucciones
- Humedece un paño limpio con agua helada y aplícalo en la zona afectada.
- Si lo prefieres, utiliza cubitos de hielo envueltos en un paño o una bolsita de gel frío.
- Mantén las compresas sobre la irritación durante 10 o 15 minutos.
- Si el malestar persiste, úsalas hasta 3 veces al día.
2. Aloe vera
Uno de los remedios tradicionales para calmar los síntomas de la dermatitis causada por acrilatos es el aloe vera. Sus propiedades antiinflamatorias, hidratantes y regeneradoras, que provienen de compuestos como las aloínas y los polisacáridos, colaboran en el alivio de la picazón y el ardor.
Instrucciones
- Asegúrate de retirar primero cualquier residuo del alérgeno. Luego, lávate bien las manos y aplícate una fina capa de gel de aloe vera en las uñas y los dedos afectados.
- Deja actuar el producto durante 15 o 20 minutos, hasta que seque o absorba.
- Para terminar, aclara con agua fría.
- Repite el remedio 2 o 3 veces al día, según lo veas necesario.
3. Bicarbonato de sodio
Por su naturaleza alcalina, el bicarbonato de sodio se utiliza como complemento para equilibrar el pH de la piel y contribuir al alivio de los síntomas causados por las alergias. Su textura también sirve como exfoliante suave, lo que permite remover residuos de los compuestos irritantes que pueden haber quedado en las uñas.
Ten presente que su efectividad está basada, en gran medida, en la experiencia popular y en sus propiedades químicas conocidas. No hay estudios específicos sobre su aplicación en caso de alergia al acrílico, así que úsalo con precaución.
Instrucciones
- Humedece una cucharada de bicarbonato de sodio (15 gramos) con un poco de agua hasta obtener una pasta espesa.
- Frótala sobre las áreas afectadas y deja actuar 10 minutos.
- Para finalizar, aclara con abundante agua.
- De manera opcional, vierte dos cucharadas de bicarbonato de sodio (30 gramos) en un tazón o recipiente hondo con agua fría. Luego, sumerge los dedos durante 10 o 15 minutos.
4. Avena coloidal
La avena coloidal, debido a su abundante contenido de avenantramidas y beta-glucanos, es un ingrediente con interesantes aplicaciones en dermatología. Estos compuestos le confieren propiedades antiinflamatorias, antipruriginosas (que reducen la comezón) y calmantes, idóneas para reducir la piel irritada por la alergia al acrílico.
Sola o añadida en productos formulados puede reducir la comezón, el ardor, la sequedad y el enrojecimiento. De paso, contribuye a la recuperación de la barrera cutánea, que suele alterarse por esta reacción.
Instrucciones
- Muele dos cucharadas de avena (30 gramos) hasta obtener un polvo fino.
- Luego, mézclalo en un recipiente con agua tibia.
- Introduce los dedos durante 15 o 20 minutos.
- Para terminar, sécate con cuidado, sin frotar.
5. Agua de caléndula
En la medicina tradicional, el agua de caléndula se ha empleado como tratamiento natural para diversos problemas dermatológicos, incluida la irritación causada por alergias, como la del acrílico. Sus propiedades calmantes se atribuyen a su contenido de flavonoides, que ejercen acción antiinflamatoria.
Al aplicarla de forma tópica, refresca la piel y disminuye la comezón, el enrojecimiento y la hinchazón. De todos modos, pese a su uso popular, la evidencia sobre su eficacia aún es escasa. Úsala solo de forma complementaria.
Instrucciones
- Prepara una decocción con 2 cucharadas de flores de caléndula secas (30 gramos) en una taza de agua (250 mililitros).
- Una vez esté lista, deja reposar hasta que enfríe y cuela la preparación.
- Vierte el líquido en un recipiente hongo y sumerge los dedos afectados por 15 o 20 minutos.
- Repite su aplicación 2 o 3 veces al día.
6. Manzanilla
La manzanilla es uno de los remedios caseros más utilizados a la hora de calmar los síntomas de la alergia al acrílico. Su alto contenido de antioxidantes, como los flavonoides, contribuye a inhibir la liberación de sustancias inflamatorias en la piel, lo que facilita el alivio de la irritación y la comezón.
Instrucciones
- Pon a remojar una o dos bolsitas de té de manzanilla (10 gramos) en una taza de agua caliente (250 mililitros).
- Deja reposar la bebida hasta que esté tibia o fría.
- Introduce las uñas y los dedos durante 10 o 15 minutos.
- También puedes utilizar aceite esencial de manzanilla. Diluye 5 gotas en 15 mililitros de aceite portador y aplícalo en los alrededores de las uñas.
7. Miel
La miel tiene un historial amplio como remedio natural para el cuidado de la piel. Sus efectos antiinflamatorios, antimicrobianos y humectantes —atribuidos a su contenido de peróxido de hidrógeno, flavonoides y otros polifenoles antioxidantes— son útiles para disminuir el picor y la hinchazón alrededor de las uñas.
Instrucciones
- Toma una cucharada de miel (15 gramos) y extiende una fina capa sobre la piel irritada.
- Deja actuar 15 minutos y enjuaga con agua tibia.
- Si las molestias persisten, repite el remedio 2 o 3 veces al día.
8. Agua de rosas
Los beneficios potenciales del agua de rosas para disminuir la irritación de la piel se vinculan a su contenido de compuestos fenólicos y otros antioxidantes. Hasta ahora, no hay estudios científicos concretos sobre su efectividad contra la alergia al acrílico.
A pesar de esto, su aplicación tópica favorece el alivio de la inflamación, el ardor, el enrojecimiento y la picazón. Puedes utilizarla para refrescar la piel y reducir la tentación de rascarla.
Instrucciones
- Empapa un disco de algodón o una compresa limpia con agua de rosas natural.
- Frota el producto en la piel irritada y déjalo actuar sin enjuagar.
- Reaplica cada 3 o 4 horas, hasta notar una mejoría.
9. Aceite de coco
Emoliente, antiinflamatorio, antimicrobiano y antioxidante, el aceite de coco es un gran aliado para calmar alergias, como la que causa el acrílico. Su compuesto activo, el ácido láurico, actúa al reducir la inflamación y fortalecer la barrera cutánea. Puedes utilizarlo para evitar la pérdida de humedad, el ardor, la irritación y posibles infecciones secundarias en las zonas afectadas.
Instrucciones
- Toma una pequeña cantidad de aceite de coco virgen y aplícalo sobre la piel irritada.
- Deja que se absorba sin enjuagar.
- Repite 2 o 3 veces al día.
10. Solución salina
La alergia al acrílico puede cursar con síntomas respiratorios, como irritación de la nariz y congestión, dado que los compuestos volátiles del producto ascienden por los conductos nasales. En estos casos, la solución salina sirve como remedio natural.
Funciona aplicada mediante un lavado nasal, con el que se pretende eliminar los alérgenos y los residuos acumulados. No tiene propiedades útiles para reducir la reacción alérgica en la piel.
Instrucciones
- Diluye media cucharadita de sal (1-2 gramos) en una taza de agua destilada o hervida (250 mililitros).
- A continuación, inclina la cabeza hacia un lado y vierte la solución salina en una fosa nasal, con la ayuda de un gotero o jeringa.
- La idea es que el líquido salga por la otra fosa.
- Luego, repites del lado contrario.
¿Cómo reconocer que eres alérgico al acrílico?
La única forma certera para diagnosticar alergia al acrílico es a través de la revisión de un médico o dermatólogo. Ante la sospecha por síntomas cutáneos o respiratorios tras la exposición al material, el profesional sugerirá pruebas de parche, análisis de sangre y otros exámenes cutáneos para confirmar si la reacción es causada por los acrilatos o por otro alérgeno.
Las siguientes manifestaciones pueden alertarte de la condición:
- Piel: enrojecimiento, sarpullido, picazón e hinchazón, sobre todo, en las áreas en contacto con el acrílico.
- Aparato respiratorio: dificultad para respirar, sibilancias, opresión en el pecho, tos y dolor de garganta.
Considera también el momento de aparición de las molestias. Su ocurrencia durante o después de usar productos acrílicos y su remisión o disminución al eliminar los residuos del material son indicativos de alergia.
¿Es posible prevenir la alergia al acrílico?
Sí. Hay algunas medidas preventivas que puedes implementar si los acrilatos te causan alergia. La más efectiva, por supuesto, es evitar el contacto directo con los monómeros, que son los principales detonantes de la reacción.
En este sentido, si quieres mejorar la estética de tus uñas, opta por técnicas como las uñas en gel o, mejor aún, las tradicionales. Ten en cuenta que si tienes antecedentes de sensibilidad, debes hacer una pequeña prueba antes.
Para ello, pídele a tu técnico de uñas que realice la aplicación del producto en una de tus uñas. Deja pasar 30 minutos, por lo menos, y observa la reacción. Ciertas veces, puedes manifestar signos de alergia al esmalte y no solo al acrílico.
Trascurrido este tiempo, si no presentas irritación, ardor o comezón, puedes proseguir sin ningún problema. En caso contrario, retira pronto los productos y consulta al dermatólogo.
Si eres manicurista y tienes la alergia, la clave está en la precaución y en un adecuado manejo de los productos. Deberías usar guantes de nitrilo o látex de alta calidad mientras aplicas el acrílico. Además, procurar hacerlo en un espacio ventilado para reducir la exposición a los vapores.
Los remedios caseros te brindan alivio temporal
Ya sea que prefieras probar con compresas frías, aloe vera, avena, miel o cualquiera de los remedios antes mencionados, puedes intentar reducir los síntomas de la alergia al acrílico, siempre que no se presenten señales graves evidentes.
Los remedios caseros que te contamos se centran en el alivio de la inflamación, el enrojecimiento y el picor, que son las manifestaciones típicas de la reacción alérgica. Sin embargo, debes considerar que su efecto es temporal y no tan efectivo como el de los fármacos recetados por el médico (corticosteroides y antihistamínicos).
Es preferible consultar al dermatólogo, sobre todo, si no se ha confirmado el diagnóstico o si hay irritación severa y prolongada, hinchazón, ampollas, dificultad para respirar o infecciones secundarias. La combinación de cuidados en el hogar y la orientación médica te ayudarán a manejar de forma adecuada esta alergia para que no afecte tu calidad de vida.
Con información de Mejor con Salud