Durante el embarazo, todo el cuerpo experimenta cambios significativos que pueden cobrar factura en la piel en forma de manchas, estrías o celulitis, las cuales pueden ser tratadas durante la gestación, en el postparto y la lactancia.
Hasta hace algunos años, para tratar la piel de las embarazadas, principalmente, había dos opciones: menjurges caseros y productos dermocosméticos genéricos enfocados en las antiestrías, el alivio de las piernas cansadas y despigmentantes.
Actualmente, una correcta rutina para embarazadas debe considerar que durante el periodo de gestación la piel va atravesando por diferentes etapas y, por lo tanto, requiere distintos cuidados específicos.
Primer trimestre: Radiante y sensible
Algunas mujeres experimentan una mejora en la apariencia de su piel debido al aumento del flujo sanguíneo y las hormonas. Esto puede dar lugar a un aspecto más brillante y radiante. Aunque, dicho aumento del flujo sanguíneo también puede causar enrojecimiento en ciertas áreas de la piel y, en algunos casos, puede aumentar la sensibilidad de la piel. Además de que, debido a los cambios hormonales, también se puede notar un aumento en la aparición de acné.
Segundo trimestre: Estrías y manchas
En esta etapa, el brillo de la piel se estabiliza y algunas mujeres notan una disminución de la piel grasa. Esta falta de oleosidad, sumada al estiramiento de la piel, puede contribuir a la aparición de estrías, especialmente en el abdomen. Por otro lado, algunas mujeres pueden desarrollar una línea oscura vertical en el centro del abdomen, conocida como “línea nigra”.
Tercer trimestre: Resequedad y ¡más manchas!
A medida que la piel se estira aún más para acomodar el crecimiento del bebé, algunas mujeres pueden experimentar picazón y sequedad en ciertas áreas del cuerpo. Las mujeres embarazadas notan un aumento en la pigmentación de la piel, lo que puede provocar la aparición de manchas oscuras en la cara, conocidas como “cloasma” o “máscara del embarazo”. Por si fuera poco, es común que las extremidades, especialmente los pies y las manos, se hinchen debido a la retención de líquidos.
Pero aún hay más, pues durante el postparto y lactancia el cuerpo sigue transformándose. Estos son cambios silenciosos muy poderosos y quiero decirte que afectan, no sólo físicamente, también emocionalmente, se recomienda poner atención en los ingredientes de los tratamientos, pues la piel puede ser más sensible. Entre los ingredientes recomendados durante el embarazo destacan:
Manteca de karité: Tiene propiedades hidratantes y ayuda a mantener la piel suave.
Aceite de almendras: Proporciona hidratación y alivio para la piel seca y con picazón.
Aloe vera: Conocido por sus propiedades calmantes y refrescantes para la piel irritada.
Aceite de coco: Ayuda a mantener la piel hidratada y puede ser prevenir las estrías.
Vitamina E: Es un poderoso antioxidante que puede ayudar a mantener la elasticidad.
Glicerina: Ayuda a mantener la piel humectada y suave.
Es importante tener en cuenta que cada embarazo es diferente, y algunas mujeres pueden tener sensibilidades o alergias a ciertos ingredientes. Por lo tanto, siempre es recomendable consultar con un profesional de la salud antes de usar cualquier producto durante el embarazo para asegurarse de que sea seguro y apropiado para su situación particular.
Con información de Vanidades
