Robert De Niro atraviesa un momento dulce en el ámbito profesional, más aun después del reciente estreno de su última película, ‘Los asesinos de la luna’, donde coincide con otro gran rostro del cine como Leonardo DiCaprio. Sin embargo, en lo personal el intérprete no vive su mejor momento, y es que tal y como ha informado ‘Radar Online’, se enfrenta a una acusación de su antigua trabajadora en el hogar, Chase Robinson.
De Niro está acusado por su ex asistenta por discriminación de género, y este mismo lunes ha tenido que acudir a los tribunales federales para testificar. Una batalla legal por la que Robinson pide una cifra astronómica, 12 millones de dólares en total (11.2 millones de euros al cambio). Ella asegura que el actor le insultó en diferentes ocasiones, llamándole “p…”, además de hacer llamadas telefónicas mientras él orinaba.
De Niro la demandó antes
Una batalla en los tribunales que llega después de que el propio De Niro hubiese demandado precisamente a Chase Robinson. En ella acusaba a su ex asistenta de ver la televisión en exceso mientras trabajaba, además de utilizar la tarjeta de crédito del intérprete sin su permiso.
Chase Robinson, que fue vicepresidente de la productora de Robert De Niro, llamada Canal Productions, dimitió en 2019. Ahora, acusa al actor de ser un mal jefe y de crear un ambiente tóxico para ella. También se refiere a una conversación que tuvieron el actor y su novia, Tiffany Chen, donde éste habló de ella: “¿Quién diablos se cree que es?”.
Un mensaje al que ha respondido De Niro por medio de sus abogados: “No está claro por qué cree que esta grabación es relevante, ya que revela que su enojado empleador amenaza con despedirla por faltarle al respeto. El mensaje de voz no tiene nada que ver con el género… gritar e incluso usar malas palabras no es ilegal y también sabemos que esto fue algo poco frecuente”.
Con información de Agencias