Pese a ser una afección crónica, existen algunas maneras de aliviar el dolor.
La fibromialgia es un enfermedad que afecta entre el 2% y el 6% de la población mundial, esencialmente mujeres. En cifras de España, más de 900.000 personas la sufren (en torno al 3% de la población), según los últimos datos aportados por la Sociedad Española de Reumatología. Se trata de una afección crónica que se caracteriza por causar dolor en los músculos, ligamentos y articulaciones.
Entre otras afecciones, los expertos sostienen que los pacientes de fibromialgia suelen ser más sensibles al dolor que aquellas personas que no la padecen, lo que se conoce en medicina como alodinia o percepción anormal del dolor. No hace mucho que este trastorno crónico era inexplicable clínicamente y muy confuso, pero cada vez los profesionales de salud se acercan más a la enfermedad, entienden mejor sus síntomas y perfeccionan los tratamientos para combatir el dolor.
Sin embargo, las afecciones de la fibromialgia no se reducen al campo de lo físico, puesto que también puede llevar consigo otras dolencias psíquicas igual de molestas. Los pacientes de fibromialgia a menudo sufren de depresión y ansiedad, además de tener problemas para dormir o con la memoria o la concentración. Muchas de ellas aseguran tener “lagunas” o niebla mental, es decir, la dificultad para recordar algunas cosas o encontrarse en un estado de confusión.
Respecto a qué causa esta afección crónica, no hay demasiados avances. Este plano de la fibromialgia sigue siendo el más oscuro, ya que los expertos no terminan de ponerse de acuerdo. En muchas ocasiones, la fibromialgia se desarrolla por sí sola, sin responder aparentemente a nada, aunque bien pudiera encontrarse la explicación en los genes. Por otra parte, existen algunos aspectos que sí pueden contribuir a la aparición de este trastorno musculoesquelético, como accidentes de tráfico, lesiones o infecciones virales que terminen por desarrollar en el paciente una fibromialgia.
Dada la falta de explicación de las causas, cualquier persona puede estar en riesgo de tener fibromialgia, aunque algunos perfiles son más de riesgo que otros. Los pacientes más comunes son las mujeres (tienen hasta el doble de posibilidades de padecerla), las personas de media edad, aquellas con antecedentes familiares o enfermos de lupus (una enfermedad autoinmune), artritis reumatoide (que afecta especialmente a muñecas y dedos) o espondilitis anquilosante (un tipo de artritis que perjudica la columna vertebral).
Los expertos consideran que el tratamiento multidisciplinar es la mejor forma de aliviar el dolor de la fibromialgia, puesto que es es la terapia que ha demostrado mayor eficacia en los pacientes. Esta atención multidisciplinar aborda desde la medicación (analgésicos o ciertos antidepresivos que ayudan con los problemas de sueño), los masajes terapéuticos o el estilo de vida. Hacer ejercicio, llevar una dieta saludable y controlar el estrés pueden ayudar en gran medida a combatir esa afección crónica.
Con información de 800 Noticias