El Dr. Carlos Bermúdez ha desarrollado una técnica única en Venezuela y el mundo para realizar la cirugía fetoscópica para corrección de espina bífida y mielomeningocele, con una característica fundamental: es menos invasiva que la tradicional. Además, tiene excelentes resultados para las mujeres embarazadas y sus bebés.
Junto a su equipo de especialistas, están minimizando notablemente el riesgo de prematuridad asociado a esta cirugía fetal; también garantiza la restitución de la movilidad y proyecta una mejor calidad de vida para los niños y niñas con esta condición.
Por este técnica, el Gobierno Bolivariano y el Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología otorgaron el Premio Nacional al Mejor Trabajo Científico, Tecnológico y de Innovación, mención Ciencias de la Salud.
Cirugías fetales para salvar vidas
Natural de Caracas, a sus 57 años, Bermúdez tiene la certeza de que nació para ser médico, carrera que forjó como estudiante de la Universidad Francisco de Miranda, en Coro, estado Falcón.
Posteriormente, se formó como ginecólogo, obstetra y perinatólogo en el Hospital Universitario de Caracas (HUC); cursó endoscopias ginecológicas en el Instituto Euroepa de Ciencias Endoscópicas y un curso de Cirugía Fetal en los Estados Unidos.
Recuerda que las primeras cirugías fetales las hizo en el año 2001, en el HUC. “Arrancamos el primer programa de cirugía fetal en Latinoamérica, quinto programa en el mundo”.
Antes de las cirugías fetoscópicas, menciona que realizó operaciones en bebés para atender casos de síndrome de transfusión intergemelar, problemas pulmonares y cardíacos, obstrucciones urinarias, entre otros.
“No solamente, repetimos lo que se hacía en muy pocos sitios en el mundo, sino que empezamos a desarrollar técnicas propias que publicamos en revistas internacionales (…) hicimos producción, investigación nacional que hoy en día se usa en muchos países”, precisa.
En 22 años de trabajo, el Dr. Betancourt se enorgullece de haber realizado cerca de 600 procedimientos “con cientos de bebés salvados” en Venezuela y el mundo.
“Hemos inventado desde cero y hemos modificado técnicas, como esta última, que es la técnica de corrección antenatal de espina bífida, donde hemos obtenido muchos mejores resultados, hasta los momentos, que lo que han brindado otras técnicas”, reflexiona.
Testimonios
Norwin Durán, tiene 38 años y es la madre de Fernando, el primer caso exitoso operado por el Dr. Bermúdez y su equipo, con la novedosa técnica de cirugía fetoscópica para corrección de espina bífida y mielomeningocele.
Narra que se trasladó de los Teques a Caracas buscando respuestas a la patología que tenía el feto. “No conocía nada de esta condición. En medio de mi búsqueda me comentaron de la fetoscopía, pero que no lo hacían aquí. En Internet conseguí al Dr. Bermúdez; al día siguiente en la mañana estábamos aquí”.
Durán refiere que recibió mucha información sobre la patología y lo qué podía pasar durante la operación. Este era el primer caso espina bífida en su hogar.
Hoy día Fernando tiene diez meses, la operación fue favorable ante las condiciones adversas de la patología.
El neurocirujano Rafael Rojas, que es una parte esencial durante las cirugías, afirma “sé de lo que los padres de los niños con espina bífida viven. Para mi era un sueño; yo pensé que esto no se podía hacer y se logró”.
Rojas refiere que hasta la fechan han atendido cinco casos, siendo Fernando la materialización de este logro.
“Ver aquí a Fernando es maravilloso. La cirugía fetal disminuye las secuelas neurológicas del niño al nacer. Fernando, a parte de que fue el primero y pionero, el hecho de que sea un mielomeningocele tan grande y a nivel dorsal, la consecuencia cuando no lo operas el niño totalmente parapléjico, tienen escoliosis, deformidades…no tiene una buena calidad de vida”.
Saber que en Venezuela se cuenta con especialistas que aman lo que hacen y dedican su vida a estudiar patologías complejas para brindar atención y garantizar una calidad de vida digna a los niños y niñas de la patria.
Con información de mincyt.gob.ve
