Un juez forense del Reino Unido informó este martes 9 de enero que la cantante irlandesa Sinéad O’Connor falleció el pasado julio en Londres, a los 56 años de edad, debido a “causas naturales”.
Una reseña de EFE señala que la artista fue hallada muerta el 26 de julio en un domicilio del sur de la capital británica, ciudad a la que se había trasladado a vivir ese mes desde su Irlanda natal.
Un comunicado de la Corte Forense de Southwark confirmó hoy que O’Connor “murió por causas naturales” y, por tanto, el juez “forense ha concluido su implicación” en este suceso.
Pocos días antes de su muerte, la cantante dublinesa había publicado un mensaje en su cuenta de Facebook para informar de que se había mudado a Londres y estaba acabando un álbum para publicarlo este año.
Esta instancia judicial ya explicó el pasado julio que llevaría a cabo una autopsia para determinar las causas del fallecimiento, después de que la Policía metropolitana (MET) avanzó entonces que no se consideraba “sospechosa”.
Una voz con el sonido de la conciencia
Los primeros años de vida de Sinéad O’Connor fueron complejos. Creció en un hogar disfuncional que terminó en divorcio. Ella y varios de sus cinco hermanos quedaron bajo el cuidado de su madre, quien los golpeaba.
Esa experiencia la reflejó más tarde en la canción “Fire on Babylon”, al igual que su modo de ver al mundo, que incluyó opiniones políticas, historia, filosofía y religión, que le trajeron consecuencias negativas, pero también la llevaron a ser un ícono para muchas personas que se alinearon con sus ideas.
Una de las polémicas más grandes que la envolvió fue cuando se presentó en el programa “Saturday Night Live” en 1992 y rompió una foto del papa Juan Pablo II, al tiempo que cambió parte de la canción “War” de Bob Marley para relacionarla con abusos sexuales que cometían muchos sacerdotes de la iglesia católica.
Años más tarde pidió el perdón del Papa y dijo que fue un acto lleno de ira, para en 2002, en medio de una entrevista, reivindicar su actuación en SNL.
Lo hizo durante una entrevista en la que surgió el tema de su desprecio contra el sumo pontífice, y Sinéad aseguró que no se arrepentía de lo que hizo 10 años atrás. En esa nueva oportunidad no recibió ataques ni se registraron protestas en su contra puesto que se habían hecho públicas algunas denuncias en contra de la institución católica por encubrir violaciones y abusos a niños por parte de sacerdotes. Hoy puede decirse que el tiempo le dio la razón.
Con información de ÚN…
