Llena de gozo y fe, la feligresía trujillana junto a la iglesia católica y autoridades regionales y municipales celebraron, este miércoles, el Día de Nuestra Señora de la Paz, patrona espiritual del estado Trujillo, con una programación que inició a las 7 de la mañana.
Luego, la primera procesión con la santa imagen por las calles de Trujillo capital partió desde el parque La Trujillanidad hasta la iglesia catedral, donde ingresó en hombros de sus cargadores y acompañada de miles de creyentes, quienes dieron gracias por los favores concedidos, otros pidieron por sus necesidades y de sus familias.
Más tarde, al iniciar la eucaristía solemne el obispo diocesano de Trujillo, monseñor José Trinidad Fernández Angulo, recordó al beato José Gregorio Hernández, sus huellas de bondad, caridad y amor mariano, ser hombres y mujeres de bien.
Asimismo, manifestó que las enseñanzas del sacerdote español Ignacio de Loyola de amar y servir hacen falta tanto en el país como en la iglesia.
“Amemos como Dios nos ama, que nos entreguemos siempre al servicio de Dios para edificar la iglesia del Señor y sea esa la piedra angular donde Cristo siendo el fundamento de una iglesia sinodal caminemos juntos al lado del otro, para ayudarnos como hermanos y hermanas. Un país se edifica desde la justicia, desde la paz, desde el amor, desde la solidaridad y María fue esa mujer solidaria que fue al encuentro de los demás. Como pueblo de Dios, como gobernantes, como clérigos, como personas de fe hagamos que Trujillo sea un lugar de esperanza y la esperanza se construye desde la paz, cuando hay justicia y hay bienestar para todos”, resaltó.
La eucaristía solemne fue oficiada por monseñor Carlos Enrique Curiel Herrera, obispo de Carora, quien se mostró gozoso al celebrar los 454 años de Nuestra Señora de la Paz.
Visiblemente emocionado señaló que la Virgen de la Paz llena los corazones de sus fieles de alegría, felicidad y de paz desde lo personal, familiar, comunitario y eclesial.
“Pueblo, gobierno, instituciones, todos tenemos que abrir el corazón a esa verdad con mayúscula que nos da nuestra madre Nuestra Señora de la Paz, para que caminando juntos compartiendo las angustias, las tristezas, las alegrías y las esperanzas podamos caminar alegres en la esperanza de un mundo, de una Venezuela mejor, más humana, más fraterna, donde reine la justicia y la paz, donde haya comunión y donde podamos tener vida en el Señor”, exclamó.
Pidieron por la paz
Entretanto, el gobernador Gerardo Márquez, en declaraciones a los medios de comunicación, aseguró que Trujillo se desbordó de alegría y de amor por su santa patrona Nuestra Señora de la Paz; al tiempo que pidió por un año de tranquilidad y prosperidad para todos los venezolanos.
“La Virgen de la Paz es la madre de Jesús, el hijo de Dios, quien puede interceder para que haya paz no solo en Venezuela sino en el mundo. Hoy se desborda Trujillo de devoción, de alegría, de gozo, de paz y en nombre de todos los trujillanos queremos que la bendición de la Virgen de la Paz se extienda a lo largo y ancho de este país y que este sea un año de prosperidad, de paz y de tranquilidad para todos los venezolanos”, aseveró.
El mandatario regional subrayó que el estado Trujillo es privilegiado por tantas bondades que posee y está bendecido por el beato José Gregorio Hernández y por Nuestra Señora de la Paz.
Al finalizar la misa, Márquez obsequió al obispo diocesano de Trujillo, monseñor José Trinidad Fernández, una hermosa replica de Nuestra Señora de la Paz.
Iglesia agradecida
Por su parte, el presbítero Gustavo Godoy, párroco de la iglesia catedral, agradeció la presencia de los obispos monseñor Carlos Curiel, monseñor José Trinidad Fernández y el obispo castrense para Venezuela; monseñor Benito Adán Méndez, sacerdotes de diversas parroquias eclesiásticas del estado, diáconos, seminaristas, así como el apoyo de todos quienes aportaron su granito de arena para la solemnidad de Nuestra Señora de la Paz.
“Quiero agradecer un trabajo extraordinario de la Sociedad de la Virgen de la Paz, cargadores de la Virgen, de los equipos de protocolo, logística, el equipo de ornato para el embellecimiento del templo, a nuestros medios de comunicación como Radio Paz, TvTrujillo, al gobernador Gerardo Márquez y a todo su equipo, al alcalde Carlos Terán por su colaboración para esta gran fiesta. Gracias a todos los comerciantes, a los benefactores, a los que están en el exterior, a la Cámara de Comercio de Trujillo y a todas las instituciones, Dios se los pague”, expresó.
Godoy finalizó diciendo que Trujillo ama a la Virgen María y la santa patrona Nuestra Señora de la Paz está en el corazón de todos los trujillanos.
Ofrenda de amor
Es de resaltar, que el vestido usado por la imagen de Nuestra Señora de la Paz en su día central fue ofrendado por el joven Josfran Villegas y diseñado por Víctor Manuel Hernández junto a su equipo de trabajo, quien desde el año 2016 esperaba por pagar su promesa a la madre de los trujillanos.
El hermoso vestido posee mangas largas, de corte tipo imperio, un delicado diseño de arabescos con textura aterciopelada color ámbar, salpicado en perlas, diminutos cristales, ámbar, tornasol y plata. Sobre los hombros posa una estola de donde emergen las mangas superficiales bajo una lluvia de flores, simulando de esta manera una capa. En el pecho se refleja un radiante corazón rojo, finamente trabajado con cristales y perlas siendo este el punto focal del vestido.
Las festividades culminaron con la tradicional peregrinación nocturna por la avenida Bolívar e Independencia del municipio Trujillo capital, donde la población nuevamente demostró su devoción, amor y agradecimiento a Nuestra Señora de la Paz.
Con información de Últimas Noticias