El glaucoma, una enfermedad ocular crónica que afecta el nervio óptico, es una de las principales causas de ceguera en todo el mundo y puede aparecer a cualquier edad, aunque es más común en pacientes mayores de 60 años de edad, según datos de la Clínica Mayo (Estados Unidos).
A menudo se lo denomina el “ladrón silencioso de la vista” porque, en sus etapas iniciales, puede que no presente síntomas evidentes.
Esta condición ocular daña la visión periférica de forma gradual y, de no tratarse a tiempo, puede avanzar hacia la ceguera total. Sin embargo, lo que resulta más preocupante, según expertos, es que el glaucoma suele ser confundido con otras enfermedades oculares, lo que aumenta su dificultad en el diagnóstico temprano y tratamiento oportuno.
Una investigación de la Asociación Americana de Oftalmología detalló que el glaucoma es una enfermedad compleja que implica un aumento de la presión intraocular, lo que provoca daños en el nervio óptico.
Efectos del glaucoma
-Los efectos del glaucoma resultan en una pérdida gradual de la visión que comienza por la periferia y va avanzando hacia el centro.
-Dado que el glaucoma puede ser asintomático en sus etapas iniciales, diversos medios especializados en salud apuntan a que es crucial realizar exámenes oftalmológicos regulares para detectarlo a tiempo.
¿Por qué es difícil detectar el glaucoma?
Una de las razones por las que el glaucoma puede ser difícil de diagnosticar es por su similitud con otras afecciones oculares. Por ejemplo, la degeneración macular relacionada con la edad (DMAE) y el glaucoma pueden compartir síntomas como la visión borrosa y los problemas de percepción de los colores.
Además, la catarata, una opacidad en el cristalino del ojo, también puede causar síntomas similares a los del glaucoma, como la visión borrosa y la sensibilidad a la luz.
El Instituto de Glaucoma de la Universidad Johns Hopkins (Estados Unidos), resaltó la importancia de distinguir entre estas condiciones.
Para los investigadores, es crucial realizar un diagnóstico preciso para garantizar el tratamiento adecuado. Aunque algunas señales pueden parecer similares entre el glaucoma y otras enfermedades oculares, cada una requiere enfoques terapéuticos específicos.
Síntomas más comunes del glaucoma
Según datos de la Clínica Mayo (Estados Unidos), los síntomas más comunes del glaucoma son:
-Dolor de cabeza intenso
-Dolor de ojos intenso
-Náuseas o vómitos
-Visión borrosa
-Halos o anillos de colores alrededor de las luces
-Enrojecimiento de los ojos
Diferencia con otras enfermedades
La clave para diferenciar el glaucoma de otras enfermedades oculares radica en un examen oftalmológico completo, que puede incluir pruebas de presión intraocular, evaluaciones del nervio óptico y exámenes de campo visual.
Los avances en tecnología médica, como la tomografía de coherencia óptica (OCT) y la campimetría automatizada, han mejorado la precisión del diagnóstico del glaucoma y ayudan a los oftalmólogos a identificarlo más temprano.
“La OCT es un estudio de imágenes no invasivo que utiliza ondas de luz para obtener imágenes en corte transversal de la retina. Con este estudio, su oftalmólogo puede ver cada una de las diferentes capas que forman la retina”, explica la Academia Americana de Oftalmología en su sitio web.
Por otra parte, la campimetría es un tipo de oftalmológica que ayuda a medir el campo visual.
El tratamiento del glaucoma generalmente implica reducir la presión intraocular para prevenir daños adicionales en el nervio óptico. Esto puede lograrse mediante medicamentos, procedimientos láser o cirugía, según la gravedad del caso.
Con información de El Diario