Hace semanas, Daniela Atencio, una amiga de mi hija, se encontró un Cocker espaniel sucio, desnutrido, con una pata lesionada. Lo llevó a su casa, lo recuperó, y al cabo de unas semanas indagó en la zona por donde lo encontró y colocó publicaciones en sus redes sociales en busca del dueño que todavía sigue sin aparecer.
En este caso ella hubiera querido quedarse con el perro, pero le buscaba un hogar y nadie se responsabilizó. “Es una raza muy grande, comen mucho y a veces no tenemos para comer en la casa, menos para darle a él y tuve que dejarlo en un parque con comida, agua, cobijita para ver si alguien lo tomaba”, dijo.
Centenares de perros y gatos hay en las calles de Maracaibo, superando con cifras alarmantes las que se cuentan a nivel nacional , según las estimaciones que pueden existir en el resto del país.
El médico veterinario, miembro del comité de sanidad agropecuaria del colegio de veterinarios del Zulia, Wilger Machado, informó a Noticia al Día vía telefónica, que la situación es cada vez más grave porque han sido cerrados prácticamente la mayoría de los refugios de animales que existían por no poder atenderlos ante el elevado costo de los alimentos y la manutención veterinaria, incluyendo medicamentos y consultas médicas.
Ante una incontrolable inflación y una crítica escasez de alimentos y medicamentos, muchos venezolanos han optado por abandonar sus mascotas y dejarlos en la calle, para destinar el sueldo completo o los pocos alimentos que pueden colocar en la mesa familiar. Cada día son más y se cuentan en centenares , los que buscan refugio en los alrededores de mercados, centros comerciales, restaurantes, sitios de comida rápida y en cualquier sitio donde haya concentración como las paradas de autos por puestos y terminal de pasajeros.
“Todos los días una familia suelta a la calle su mascota, bien sea un perro o gato, por no poder atenderlo”-dijo- Wilger, mostrando su preocupación ante ello. “La mayoría de los refugios que existían para ello han desaparecido y ante la decisión de tener que desprenderse de su compañero de mucho tiempo, no les queda otra alternativa que solarlos y es por eso que los vemos deambulando por las calles y avenidas de la ciudad”
La crisis económica que se vive deja a las familias sin mascotas y algunas familias han proferido castrarlos en el caso de los felinos, y con el dolor de su alma soltarlos ala calle porque ya ni refugios para ellos quedan, aseguró.
Con información de Noticia al Día
