La cosecha de café arrancó tímidamente en Venezuela, con un precio establecido por quintal, que ronda los $180 y $190 pagados a la tasa oficial del Banco Central de Venezuela (BCV), lo que a diferencia del paralelo, genera una pérdida de más del 15% en el ingreso de los caficultores y sus costos de producción.
«Es legal que lo paguen al BCV pero con la situación real de la economía del país, recibimos el pago con una gran diferencia. Estamos saliendo afectados y lo ideal es que lo paguen en divisas como en cosechas anteriores. Nos termina quedando en unos 160 dólares», comentó Felix Saavedra, caficultor del estado Lara.
El costo de producción de un quintal de café está por los $190 a $200, «si nos pagan por debajo estamos perdiendo», dijo.
A pesar de la diferencia que estarían perdiendo los caficultores por recibir el pago en moneda local, el dirigente aspira que los precios se mantengan, «el cambio de ministro de agricultura (Menry Fernández) nos puede ayudar y tenemos que forzar la barrera para evitar que los precios bajen en tiempo de cosecha (…) el año pasado llegaron a cancelar el quintal en $120 y eso es grave porque no nos alcanza para cubrir los costos de producción».
Acuerdo
Recientemente, representantes de la agroindustria y productores definieron los precios para los diferentes grados de café, quedando el grado 3 en $200, grado 4 en $190, mientras que el canephora quedó en $150.
Los precios del café grado 1 y 2, serian fijados mediante una negociación directa entre las partes, para garantizar una «remuneración justa y equitativa».
Bajo suministro
Saavedra, alertó sobre los problemas con el suministro de gasoil, que se extienden en pleno inicio de cosecha del rubro aromático.
«El molino, la trilla y secadora trabajan con motores de gasoil y necesitamos suministro constante a medida que avanza la recolección. Ni siquiera se alcanza el 10% de lo requerimientos para la cosecha», denunció.
Con información de Minuta Agropecuaria