El trono procesional de la Divina Pastora, una de las imágenes religiosas más veneradas de Venezuela, fue adornado este 14 de Enero con delicadas azucenas y rosas blancas. Este majestuoso arreglo floral fue obra del reconocido artista floral, Gustavo Silva, quien compartió con nosotros su inspiración y el profundo significado detrás de esta creación.
«Para mí, decorar el trono de la Divina Pastora es una experiencia de fe inigualable», expresó Silva. «El blanco, en esta ocasión, simboliza la pureza, la elegancia y la realeza de nuestra Madre. Queremos que cada persona que contemple este trono pueda sentir una conexión especial con ella, que su corazón se llene de paz y esperanza».
El artista detalló que la elección de las azucenas y las rosas blancas para el trono procesional no fue casual. «Estas flores son un clásico de la iconografía mariana y representan la virginidad, la inocencia y el amor incondicional. Queremos que al ver este trono, los fieles sientan que están ante la presencia de la Reina del Cielo».
Adorno del trono procesional una invitación a la comunión
La devoción a la Divina Pastora es una de las más arraigadas en Venezuela, y cada año, miles de peregrinos se congregan en Barquisimeto para participar en la procesión en su honor. Este año, el trono floral se ha convertido en uno de los principales atractivos de la celebración, despertando la admiración y el fervor de los fieles.
«Nuestra petición es que cada corazón pueda conectar su corazón con la Divina Pastora», concluyó Silva. «Que esta imagen nos inspire a vivir con más fe, esperanza y caridad».
Con información de La Prensa de Lara