Bayer Leverkusen estuvo lejos de obrar un milagro este martes y fue eliminado en los octavos de final de la Liga de Campeones al caer por 0-2 ante un Bayern Múnich claramente superior, que ganó con los goles de Harry Kane y Alphonso Davies.
La misión del Leverkusen era buscar la remontada tras el 3-0 encajado en la ida y el equipo salió a intentar crear confusión en la mitad contraria a punta de intensidad y buscando en el área a Patrick Schick.
Sin embargo, las primeras ocasiones claras las tuvo el Bayern. El meta del Leverkusen, Lukasz Hradecky, tuvo que intervenir dos veces a remates de Harry Kane: la primera vez en el minuto 5 cuando, tras una gran jugada de Jamal Musiala por la izquierda, Kane remató dentro del área y Hradecky estuvo a tiempo en el piso. La otra llegada se dio el 15 con un remate desde fuera del área tras una pérdida de balón en la salida.
En general, en la primera parte el Bayern tuvo más llegada. Del Leverkusen lo más peligroso fueron dos remates de cabeza de Patrick Schick, en el 38 y en el 44. Pero atrás Minjae Kim y Dayoy Upamecano ganaban los duelos a los delanteros del Leverkusen.
El Bayern encontró el gol ya en el segundo tiempo en el minuto 52 a partir de una falta lanzada por Joshua Kimmich desde el medio campo. Kimmich metió el balón al área que aterrizó en los pies de Kane, que apenas tuvo que tocar la pelota para definir.
Tras el gol de Kane vino una fase en la que el Leverkusen trató de apretar y seguir creyendo en un milagro cada vez más improbable. Moviendo el banquillo -entraron Viktor Boniface y Amri Adli por Arthur y Aleiz García-, Alonso quiso dar la señal para una andanada ofensiva.
Hubo un par de ocasiones. Un remate de Jeremie Frimpong que el meta Jonas Urbig desvió a saque de esquina, un remate de Alejandro Grimaldo bloqueado a córner y un cabezazo de Schick que se encontró con una buena reacción de Urbig.
Pero otra falta de Kimmich, esta vez desde la propia mitad, fue el origen de la jugada que trajo el segundo gol del Bayern. Kimmich metió un balón largo que ganó Serge Gnabry, este jugó con Kane, que la tocó al centro del área donde apareció Alphonso Davies para definir.
El segundo gol ya era demasiado para que el Leverkusen pudiera seguir creyendo y las cosas pudieron incluso ponerse peores para los dirigidos por Alonso. Musiala estuvo muy cerca del tercero con un remate a la escuadra y otro al poste.
Con información de EFE