La empresa china, Wuxi Beita Pharmatech, anunció el desarrollo de un prototipo de batería nuclear ultraduradera, Zhulong-1, basada en el isótopo carbono-14 (C-14). A diferencia de las baterías químicas convencionales, las baterías nucleares generan electricidad a partir de la energía liberada por la desintegración radiactiva. Este dispositivo fue creado en conjunto con la Universidad Normal del Noroeste, institución pública del gigante asiático.
La Zhulong-1 combina semiconductores de C-14 y carburo de silicio (SiC), para crear un flujo continuo de electrones, lo que garantiza una alta eficiencia energética y estabilidad. Durante las pruebas realizadas por el Instituto de Ciencias Físicas de Hefei, un diodo emisor de luz alimentado por la batería funcionó de manera continua durante casi cuatro meses. Además, la batería fue integrada a un chip Bluetooth, lo que permitió la transmisión de señales inalámbricas.
La batería Zhulong-1 puede operar en temperaturas que varían de -100°C a 200°C, tiene una densidad energética 10 veces superior a la de las baterías de litio-ion, y presenta una degradación inferior al 5% a lo largo de 50 años. Estas baterías nucleares tienen un amplio campo de aplicación, como en implantes médicos, marcapasos e interfaces cerebro-computadora, además de alimentar dispositivos en el Internet de las Cosas y en la exploración espacial.
Por otra parte, su resistencia a los extremos térmicos las hace ideales para proporcionar energía continua en entornos inhóspitos, como el fondo del mar, la Antártida, la Luna y Marte. El equipo de investigación actualmente desarrolla la versión Zhulong-2, que se prevé lanzar a finales de este año o principios de 2026, con costos reducidos y un tamaño «comparable al de una moneda», según declaró el investigador líder de este proyecto, Zhang Guanghui.
Con información de VTV