La monja brasileña Inah Canabarro Lucas, reconocida como la persona más longeva del planeta, murió el miércoles 30 de abril a los 116 años en Porto Alegre, al sur de Brasil, informó la Congregación de las Hermanas Teresianas, comunidad religiosa con la que vivía.
Canabarro nació el 8 de junio de 1908 y asumió el título de decana de la humanidad tras la muerte en enero de la japonesa Tomiko Itooka, quien también tenía 116 años. Con su partida, el reconocimiento pasa ahora a Ethel Caterham, ciudadana británica de 115 años y 252 días, según datos del Grupo de Investigación Gerontológica (GRG) de Estados Unidos y de la organización LongeviQuest.
«En el día de hoy, que la resurrección abrace a la Hermana Inah Canabarro, damos gracias por la entrega y dedicación, pedimos que el Señor, Padre de bondad, la reciba y la acoja en su infinito amor», expresó la Congregación de las Hermanas Teresianas a través de un comunicado.
Aunque en algunos registros se menciona el 27 de mayo como fecha de nacimiento, el GRG aclaró que el dato verificado corresponde al 8 de junio.
¿Cómo fue la infancia y juventud de Inah Canabarro Lucas?
Originaria de San Francisco de Asís, en el estado de Rio Grande do Sul, Canabarro enfrentó problemas de salud en su niñez, según reseña su biografía publicada por LongeviQuest.
Comenzó su vida religiosa a los 16 años, tras ingresar a una escuela teresiana en Santana do Livramento, cerca de la frontera con Uruguay. Posteriormente residió un tiempo en Montevideo. A los 26 años fue ordenada como monja y dedicó su vida al servicio religioso, desempeñándose como docente y secretaria, según reseñó DW.
Su secreto para la longevidad
Cuando fue consultada por el secreto de su longevidad, respondió: «Él es el secreto de la vida. Es el secreto de todo», dijo en referencia a Dios.
En 2018, poco antes de cumplir 110 años, recibió la bendición apostólica del papa Francisco, quien falleció el 21 de abril a los 88 años.
Canabarro Lucas se convirtió en la segunda religiosa más longeva registrada en la historia, solo por detrás de la francesa Lucile Randon, quien alcanzó los 118 años.
Con información de El Nacional