El estrés puede afectar nuestro bienestar de muchas maneras, pero una de las conexiones más sorprendentes es la «alergia por estrés». En este artículo, exploraremos qué es la alergia por estrés, sus síntomas, los mecanismos detrás de ella, y cómo se diagnostica y trata. También, proporcionaremos consejos para la gestión del estrés, que pueden ayudar a prevenir este tipo de alergia.
La alergia por estrés, técnicamente conocida como «urticaria de estrés» o «urticaria psicógena,» es una afección cutánea en la que una persona desarrolla urticaria (ronchas o habones en la piel) como respuesta a situaciones de estrés emocional. Esta reacción es una manifestación física de una respuesta emocional intensa.
Síntomas comunes
Los síntomas típicos de la alergia por estrés incluyen ronchas rojas o habones que pican y arden. Estas pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo y variar en tamaño y forma. A menudo, el picor es intenso y puede ser muy incómodo. La duración de estos síntomas suele ser breve y se resuelven una vez que se controla la fuente de estrés.
La causa: El estrés
La alergia por estrés es un fenómeno intrigante que aún se encuentra en proceso de comprensión completa. Aunque la conexión entre el estrés emocional y la respuesta alérgica no se ha detallado por completo, se ha observado que las histaminas desempeñan un papel fundamental en este proceso. Cuando experimentamos estrés emocional, el cuerpo puede liberar histaminas, que son sustancias químicas involucradas en las reacciones alérgicas.
Con información de Allergopharma
