El Gobierno de Kenia informó este lunes de que ha aumentado de 70 a 76 el número de personas muertas este mes en el país por las fuertes lluvias e inundaciones causadas por el fenómeno meteorológico de El Niño.
El presidente de Kenia, William Ruto, encabezó una reunión de su gabinete en Nairobi para evaluar las «inundaciones generalizadas que lamentablemente han provocado pérdidas de vidas, desplazamientos de familias, brotes de enfermedades, destrucción de infraestructuras y propiedades», indicó la Presidencia en un comunicado.
«Hemos perdido setenta y seis kenianos por El Niño, mientras que 35.000 hogares han sido desplazados. Las zonas más gravemente afectadas se encuentran en el noreste, el este y la costa», explicó la nota oficial.
Un total de 38 de los 47 condados del país se hallan en la «etapa de alarma», que se caracteriza por inundaciones repentinas, anegamientos generalizados en llanuras bajas, desbordamientos de ríos, deslizamientos de tierra, pérdida de ganado y destrucción de cultivos e infraestructura.
Para ayudar a los afectados, el Gobierno movilizará 7.000 millones de chelines (unos 42 millones de euros) con el fin de desarrollar programas de asistencia.
El Gobierno instó a los kenianos a «priorizar la seguridad en sus viajes durante este período, así como en sus hogares y lugares de trabajo».
El pasado sábado, Ruto se reunió con representantes de las agencias que lideran la respuesta a este desastre, que describió como «situación de emergencia».
Ruto dio instrucciones a las Fuerzas Armadas para que aporten medios aéreos con el objetivo de «transportar por aire cualquier mercancía necesaria en diferentes partes de Kenia» golpeadas por las inundaciones.
El presidente fue criticado el mes pasado por asegurar que el país no experimentaría lluvias de El Niño, sólo fuertes precipitaciones que «no serían destructivas».
El Departamento Meteorológico de Kenia ha vaticinado que las intensas lluvias continuarán hasta enero de 2024.
En Kenia, el fenómeno de El Niño se caracteriza por fuertes tormentas que provocan inundaciones, sobre todo a lo largo de la franja costera, en zonas de las tierras altas centrales, las tierras bajas del sureste y varias áreas del noreste y noroeste del país.
El Niño es un cambio en las dinámicas atmosféricas ocasionado por el aumento en la temperatura del océano Pacífico.
Estas inundaciones llegaron después de la peor sequía registrada en el Cuerno de África en las últimas cuatro décadas, una falta de agua que dejó a Somalia al borde de la hambruna y con 6,6 millones de personas bajo inseguridad alimentaria aguda, según la ONU.
Con información de EFE