El regreso de las kilométricas colas en las estaciones de servicio ha generado un gran malestar entre los conductores del estado Táchira, quienes deben esperar hasta cinco horas n las estaciones de servicio (E/S) para abastecerse de combustible, en medio del caos por la desorganización.
Pero no es solo la escasez la que preocupa, sino también la calidad del combustible, que algunos usuarios han denunciado como de mala calidad, con un color marrón oscuro y un aspecto poco común.
La aparente normalización en la distribución del combustible solo duró unos cuantos meses, pues fue diciembre cuando empezaron a desaparecer las colas, un problema de larga data en la región, que al parecer no tiene fin para los tachirenses. Usuarios han lamentado tener que volver a la zozobra por el irregular abastecimiento de gasolina y gasol.
El diputado a la Asamblea Nacional, Gustavo Rangel, calificó la situación como una “lotería”, debido a que las personas deben madrugar para poder revisar las redes sociales del Gabinete de Combustible en las que se divulga el número de placa y la bomba asignada.
Esto no es algo nuevo para la sociedad. Sin embargo, no debe normalizarse, ¿qué es lo que busca el Gobierno? Tenemos derecho a tener calidad de vida y esto es algo que no nos ofrece el Estado venezolano desde hace mucho tiempo, debido al colapso que presentan los servicios públicos en el país”, expresó.
Rangel criticó la falta de un pronunciamiento oficial por parte de las autoridades, a quienes exigió un plan de contingencia para paliar la escasez. Asimismo, recordó que las zonas de montaña y norte son las más afectadas, pues en algunos municipios solo existe una E/S, que en ocasiones no son habilitadas en los reportes diarios.
En el llamado mercado negro, un litro de gasolina puede costar entre 4.500 y 7.000 pesos colombianos o lo equivalente a 1 dólar a un 1 dólar y medio. El monto representa un golpe al bolsillo a los ciudadanos, quienes deben optar por esta modalidad ilegal para poder movilizarse.
Fallas en los vehículos
Desde hace una semana, conductores han denunciado la baja calidad del combustible. Según las denuncias, la gasolina muestra un color que parece “agua panela”, lo que han relacionado con fallas en los vehículos, que llegan con más frecuencia a los talleres en la ciudad de San Cristóbal. Esto fue lo que le ocurrió a Anggy Depablos, quien contó que la pasada semana al salir de la gasolinera, su automóvil comenzó a perder fuerza y expulsar humo blanco.
Por temor a que se incendiara, como ha ocurrido con otros automóviles y motos últimamente, buscó ayuda. Al acudir de forma inmediata al mecánico le fue vaciado el tanque de gasolina. Luego de la revisión hallaron este líquido en el fondo con un color muy oscuro y diferente al que normalmente llega a la entidad.
Denuncias como estas se han vuelto comunes en los últimos días. Mécanicos insisten en que el combustible está contaminado y esta es la principal causa de los daños recientes a parte del parque automotor del estado Táchira.
Depablos no es la única víctima. Más de una docenas de carros en los municipios Sucre y Francisco de Miranda también presentaron fallas similares en el mismo período.
Riesgo al volante
Jhonny Gamez, trabajador de un taller mécánico de la ciudad, relató que en las últimas dos semanas entre seis y ocho carros han llegado a su taller, en promedio. Todos han presentado averías en los inyectores.
Gamez explicó que la bomba de gasolina de los vehículos también presenta deterioro por el mal estado del combustible. Ante esto aconsejó a los conductores a cambiar el repuesto, cuyo costo supera los 30 dólares.
“Cuando se saca el cunche de lo que hay en el tanque se evidencia la mugre y el color que tienen. Esto provoca que el carro bote humo y pierda velocidad”, expresó.
El mecánico alertó que esta falla representa un peligro, pues los vehículos están propensos a daños más graves, que podrían ocasionar incendios, si no se atiende a tiempo la avería.
De acuerdo con Protección Civil Táchira, en los últimos tres meses, se han registrado incendios en tres motocicletas y cuatro carros, los cuales quedaron calcinados.
Uno de los casos más recientes fue el de un joven mototaxista, quien surtió combustible en la estación de servicio La Guacara, en San Cristóbal. A pocos metros de la gasolinera, la moto se quemó. Esta persona dependía de este vehículo para llevar el sustento a su hogar.
Con información de Crónica Uno