Las autoridades colombianas tomaron posesión de bienes inmuebles y establecimientos comerciales valuados en más de 1,2 millones de dólares pertenecientes a una red criminal que desviaba productos químicos para el procesamiento de cocaína en el departamento de Norte de Santander, informó este jueves la Fiscalía.
Los bienes ocupados -como paso previo a la expropiación- están ubicados en Chinácota y Villa del Rosario, poblaciones del departamento de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela, y en Bogotá, según precisó la Fiscalía en un comunicado.
La red utilizó una empresa de pinturas en Bogotá para adquirir productos químicos que luego eran enviados a Norte de Santander, donde hay cultivos de coca que se procesa para obtener cocaína.
Algunos de los bienes afectados quedaron a disposición de la Sociedad de Activos Especiales (SAE), que se ocupa de administrar los bienes incautados a la mafia.
Los cultivos de coca en el departamento de Norte de Santander están concentrados en la región del Catatumbo, en la que, según cifras del Gobierno colombiano, hay 55.000 hectáreas de cultivos.
En enero pasado, la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) lanzó en la región del Catatumbo (noreste) una ofensiva contra la disidencias del Frente 33 que dejó inicialmente más de 80 muertos y unas 70.000 personas desplazadas, que se vieron obligadas a buscar refugio en ciudades como Cúcuta, Ocaña y Tibú.
Los enfrentamientos de esas dos guerrillas son para el control de la zona y con ello las economías ilícitas, entre ellas la cadena del narcotráfico.
Colombia es el país con más hectáreas cultivadas de coca, un total de 253.000 en 2023, según cálculos de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, en inglés), y también el que más produce.
Las autoridades del país andino han intensificado los operativos en contra del narcotráfico porque esperan que, con base en sus resultados, Estados Unidos certifique al país por su lucha contra las drogas.
Con información de EFE
