Entre calles, fortalezas, conventos, iglesias y museos, Barcelona, la capital del estado Anzoátegui, narra la historia de un pueblo aguerrido. Esta ciudad, enclavada en las riberas del río Neverí, es un fiel retrato de la lucha por la independencia de Venezuela, que también representa un espacio para el turismo local y extranjero.
Declarado Bien de Interés Cultural de la Nación en 2010, el centro histórico de Barcelona es un área que abarca 62,43 hectáreas y se caracteriza por su arquitectura colonial. De estampas antañas y un legado de libertad, que ha cautivado a visitantes y lugareños.
Dada su importancia patrimonial, el Ministerio del Poder Popular para el Turismo, validó la primera Ruta Turística de esta entidad oriental, denominada “Barcelona Heroica”. Un recorrido que inicia por la plaza Bolívar, Casa Fuerte de Barcelona, Catedral de Barcelona, Casa Amarilla, Museo Anzoátegui, Antigua Academia Militar de Barcelona, casa natal del General de División José Antonio Anzoátegui y la galería a cielo abierto “Ciudad Mural”.
Uno de los referentes más emblemáticos de Barcelona es La Casa Fuerte, un monumento histórico nacional establecido originalmente como el Convento de San Francisco. Se transformó en fortaleza por la iniciativa del General Pedro María Freites y Santiago Mariño y sirvió de refugio al pueblo ante la invasión del realista Aldana en 1817. Sus ruinas son vestigios de la masacre del 7 de abril de 1817.
Fuente: Mintur