El jefe de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, pidió este viernes una «respuesta contundente y unida» al desplazamiento de tropas norcoreanas a Rusia para apoyar a Moscú en su guerra contra Ucrania, en declaraciones a EFE con motivo de su visita a Tokio y Seúl.
El alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad se pronunció así sobre lo que calificó como «unos preocupantes acontecimientos», que formarán parte de la agenda de sus reuniones de este viernes con los ministros nipones de Defensa y de Exteriores en Tokio, y el próximo lunes en Seúl con el canciller surcoreano.
«Claramente, necesitamos una respuesta contundente y unida, dado que se están vulnerando los principios más fundamentales en asuntos internacionales a los que estamos profundamente vinculados la Unión Europea, Japón y la República de Corea (nombre oficial de Corea del Sur)», dijo Borrell en una entrevista por escrito.
El jefe de la diplomacia comunitaria explicó que la UE ha recibido información sobre el despliegue norcoreano en Rusia por parte de la inteligencia surcoreana, que envió una delegación a Bruselas a comienzos de semana y señaló que los Veintisiete también han recabado sus propios datos al respecto.
«Ahora toca trabajar en base a las pruebas que nos han transmitido», señaló Borrell, quien evitó entrar en detalles sobre la forma concreta que podría tener esa respuesta coordinada, al ser preguntado sobre si se contemplan nuevas sanciones sobre Pionyang o el envío de armamento a Ucrania por parte de Corea del Sur.
El alto representante de la UE enfatizó que los acontecimientos en Ucrania «tienen consecuencias en la región indopacífica, no solo en Europa».
Destacó que a cambio del apoyo de Pionyang a su «guerra de agresión ilegal contra Ucrania», Rusia «ha modificado su posición sobre la desnuclearización de Corea del Norte, renunciando a sus obligaciones fundamentales del Tratado de No Proliferación, incluida la prevención de la proliferación nuclear».
Moscú «está violando de hecho múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que se adoptaron con su apoyo».
Tanto los servicios de inteligencia de Seúl como los de Washington vienen señalando en los últimos días que parte del contingente norcoreano desplazado a Rusia, de un total de unos 10.000 soldados, se habría desplazado ya a la región de Kursk, fronteriza con Ucrania, y podría entrar en combate de forma inminente.
Con información de EFE