Brasil cuenta con cerca de 1,3 millones de personas que aún viven en las comunidades tradicionales creadas por los esclavos que huyeron antes de que la esclavitud fuera abolida en el mayor país latinoamericano o que se dicen sus descendientes, según datos del Censo divulgados esta semana.
De los 203 millones de habitantes de Brasil, 1.327.802, es decir el 0,65 % de la población, se declaró como “quilombola”, según datos del Censo de 2020 publicados este jueves por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE).
Los “quilombos”, conocidos en otros países latinoamericanos como “palenques”, “cumbes” o “rochelas”, eran las comunidades organizadas y aisladas en las que se establecían los esclavos cimarrones que se emancipaban de la esclavitud.
En 2020 fue la primera vez que el Censo de Brasil incluyó en sus cuestionarios preguntas específicas para identificar a las personas que se denominan como quilombolas, que el IBGE definió como aquellos “que tienen lazos históricos e ancestrales de resistencia con las comunidades y con la tierra en que viven”.
De las personas que se definen como quilombolas, tan sólo 167.202, es decir el 12,6 % del total, residen en los 494 Territorios Quilombolas reconocidos oficialmente en Brasil, es decir los que recibieron del Estado título de propiedad con esa condición y que tienen estatus similar al de las reservas indígenas.
Los otros 1,16 millones de brasileños que se identifican como quilombolas (87,4 % del total) viven fuera de estas comunidades tradicionales reconocidas por la Constitución de 1988.
De acuerdo con el Censo, Brasil cuenta con quilombolas en 1.696 de sus municipios, es decir en el 30,5 % de los 5.570 municipios del país, pero en la gran mayoría de estos lugares el número es muy reducido (en 888 viven menos de 200 quilombolas).
El 50 % de los quilombolas de Brasil está concentrado en 110 municipios, en su gran mayoría en los estados de Bahía (40), Maranhao (32) y Pará (14).
Bahía (30 %) y Maranhao (20 %), dos de los estados en el empobrecido nordeste de Brasil, concentran el 50 % de los quilombolas de Brasil. El nordeste en general cuenta con el 68 % de esta población.
Bahía es precisamente el estado brasileño con mayor porcentaje de población descendiente de africanos, y dos de sus ciudades son las que concentran mayor número de quilombolas: Salvador, su capital, con 15.897, y Senhor do Bomfin, con 15.999.
Tan sólo en cinco de los municipios de Brasil más de la mitad de la población se declara como quilombola: en Alcántara, con el 84,57 % de sus 15.897 habitantes, Berilo (58,4 %), Cavalcante (57 %), Serrano (55,7 %) y Bonito (50,3 %).
En la Amazonía fueron censados 426.449 quilombolas, que representan el 1,6 % de la población de la región amazónica y el 32,1 % de los quilombolas de Brasil.
Vía: EFE