Causas y síntomas de la Gerascofobia

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Foto: Archivo

La gerascofobia es un tipo de fobia especifica que se caracteriza por un miedo irracional a envejecer. En este caso, los montos de ansiedad experimentados son tan elevados, que se afecta el funcionamiento normal de la persona.

No hay que confundir este padecimiento con el deseo de no envejecer y la inquietud que esto pueda generar. Lo que puede ser normal en la mayoría.

La gerascofobia es una patología que se incluye dentro de los trastornos de ansiedad. De esta manera, las personas que lo padecen experimentan un miedo excesivo y persistente ante los cambios que sufren por el pasar del tiempo.

Entre los cambios que causan miedo a envejecer se encuentran la pérdida de capacidades físicas y psíquicas, la dependencia hacia los demás, los cambios en la apariencia, el agravamiento del estado de salud y la soledad. No obstante, la mayoría son prejuicios y estereotipos sociales en torno a la vejez.

Causas de la gerascofobia

La gerascofobia suele aparecer cuando las señales de la edad empiezan a hacerse evidentes. Por lo general, a mediados de los treinta. Estos signos tienden a ser las primeras arrugas, las canas en el cabello, la falta de agilidad física o la flacidez corporal. Ante estas circunstancias, la persona siente un miedo intenso.

Las causas de este padecimiento son diversas. A grandes rasgos, depende de factores externos (como las creencias y las experiencias) e internos (personalidad). Dicho esto, las más comunes son las siguientes:

Influencia de los medios de comunicación y la industria estética. Mediante campañas publicitarias establecen un ideal de belleza y felicidad basado en la juventud. Asimismo, crean estereotipos negativos en torno a la vejez, asociándola con deterioro, soledad, enfermedad y tristeza.

Miedo a estar solo.

Rasgos de personalidad narcisista.

Asociación de la vejez con muerte y enfermedad.

Vivencia de un evento traumático en el pasado que lleve a la persona a relacionar la vejez con una experiencia desagradable.

Creencias o estereotipos sociales negativos en torno a la vejez, los que se asumen como verdades.

Sensación de haber perdido los años más productivos de la vida sin haber logrado nada.

Miedo a la vejez en una mujer.

El miedo a la vejez tiene que ver, muchas veces, con la asociación de esta etapa con la soledad, lo que no siempre se cumple.

¿Qué tipo de personas son más propensas a sufrir gerascofobia?

Existen personas que son más propensas a padecer gerascofobia. Los más vulnerables son aquellos que cumplen con las siguientes características:

Personas que, debido a su profesión o a otra circunstancia, se han visto muy involucradas en la perpetuación de la juventud o cuidado del aspecto físico. Por ejemplo, modelos y actores.

Aquellos que están expuestos a la crítica social y el juicio ajeno, como influencers o famosos.

Personas que han estado en contacto con adultos mayores y han presenciado los aspectos más negativos o vulnerables de la vejez.

Aquellos con ciertos rasgos de personalidad, como inseguridad, pobre autoestima o narcisismo.

¿Cómo se manifiesta el miedo a envejecer?

Al tratarse de una fobia específica, la manifestación clínica distintiva es la sensación de ansiedad intensa ante la situación. La que puede evidenciarse a través de los siguientes síntomas:

Sudoración excesiva.

Taquicardia.

Nauseas.

Mareo.

Temblor.

Dolor torácico.

Hormigueo o adormecimiento.

Dificultad para respirar.

Sequedad en la boca.

Adicionalmente, las personas con miedo a envejecer manifiestan algunos de los siguientes signos psicológicos:

Pensamientos negativos y recurrentes sobre el futuro o el hecho de envejecer.

Impotencia por no poder impedir el envejecimiento.

Inseguridad y tristeza debido a los cambios físicos de su cuerpo, el que ya no se percibe como atractivo.

Miedo intenso a sentirse frágiles, vulnerables, enfermos, inútiles.

Problemas interpersonales. Es común que se comparen con personas más jóvenes y sientan envidia.

En ocasiones, suelen adoptar dinámicas obsesivas para ocultar las señales de madurez. Así, invierten grandes cantidades de tiempo y dinero para lucir cada vez más jóvenes.

Consejos para enfrentar el miedo a envejecer o gerascofobia

Si sufres de gerascofobia o conoces a alguien que lo padezca, a continuación ofrecemos una lista de consejos que pueden ayudar a superarla.

Acepta que ese momento llegará

Mientras más resistencia tengas hacia esta etapa de la vida, más malestar habrá en ti. Empieza a aceptar que el ciclo vital consta de infancia, juventud, adultez y vejez.

Todos estamos destinados a pasar por ellas. Ninguna es mejor que la otra; cada una tiene sus cosas buenas y malas. Recuerda que la vida es una sola y se puede disfrutar en cada momento.

Identifica los pensamientos negativos y cámbialos

Cada vez que tengas un pensamiento negativo en torno a la vejez, detente e intenta cambiarlo. Por ejemplo, si piensas “cuando sea viejo no estaré saludable”, cámbialo por “la salud y el bienestar no solo depende de la edad, sino de los buenos hábitos y estilos de vida”.

Por desgracia, existen muchos estereotipos negativos en torno a la vejez, los que creemos como si fueran verdades inminentes. Llegar a viejo no implica estar solo ni enfermo, ni amargado. Si empiezas a identificar y a reformular todas aquellas creencias que tenías en torno al envejecimiento, este proceso ya no será terrorífico.

Ten presente que el cambio es gradual

Nadie despierta de la noche a la mañana siendo mayor. Los cambios de la edad son graduales. Fluye con ellos y acéptalos como parte de la vida. Esto hace que el proceso de adaptación sea más fácil.

Ancianos cocinando.

La vejez está signada por estereotipos, pero eso no tiene por qué cumplirse. Los hábitos saludables acompañan el proceso de maduración.

Enfócate en el presente

Pensar constantemente en el futuro hace que la vida nos pase por un lado sin que nos demos cuenta. En consecuencia, cuando nos vemos en perspectiva, nos arrepentimos por ello.

Vive el presente, valora y disfruta lo que tienes. Sabemos que no siempre es tarea fácil. Para ello te recomendamos aplicar técnicas basadas en el mindfulness.

Cuídate física y mentalmente

Para que goces de una vejez saludable y feliz, recuerda que los buenos hábitos y los estilos de vida saludables son los que determinan, en gran medida, el bienestar en el futuro. Dicho esto, empieza a comer bien, a hacer ejercicio y a dormir adecuadamente.

Acude a un profesional

La mayoría de las personas que padecen de una fobia especifica requieren de ayuda profesional para superar esta patología. Si has intentado combatirla por tu cuenta y no has visto resultados, lo ideal es que acudas con un especialista.

En la actualidad, existen una serie de tratamientos psicológicos efectivos que ayudan a abordar los trastornos de ansiedad.

La gerascofobia se puede tratar

La aceptación de la vejez como etapa inevitable de la vida y el cambio de creencias negativas en torno a ella son pilares fundamentales para combatir el miedo a la vejez.

No obstante, en ocasiones hay predisponentes mucho más complejos que requieren de la ayuda de un profesional para que el padecimiento sea superado. Consulta con un psicólogo si crees que la gerascofobia altera tus patrones de comportamiento.

Con información de Mejor con Salud