China, con uno de los programas nucleares más herméticos del mundo, efectuó hoy el primer lanzamiento público en décadas de un misil balístico de largo alcance, un movimiento imprevisto que llega en medio de tensiones crecientes con Taiwán y en coincidencia con la Asamblea General de la ONU.
El Ministerio de Defensa del país asiático informó en un comunicado de que el Ejército Popular de Liberación (EPL) lanzó a las 8:44 hora local de este miércoles (00:44 GMT) un misil balístico intercontinental a aguas del océano Pacífico que transportaba una ojiva explosiva y amerizó en la zona prevista.
La cartera castrense no empleó terminología nuclear en la nota oficial, y se limitó a comentar que se trata de una acción «de rutina en el plan de entrenamiento anual y que fue notificada con antelación a los países relevantes».
Con el lanzamiento, el primero de este tipo que se hace público en más de cuatro décadas, el EPL buscaba «probar el desempeño de su armamento y la efectividad de su entrenamiento militar», dos objetivos que se alcanzaron, agregó el Ministerio.
El comunicado no especifica ni la ruta que siguió el misil ni el lugar exacto del Pacífico en el que cayó.
Se trata de la primera vez en 44 años que China hace pública una prueba de este tipo. Lo hizo antes en 1980, cuando un DF-5 despegó desde el centro de lanzamiento de Jiuquan, en el norte del país, para volar más de 9.000 kilómetros sobre el Pacífico Sur.
El lanzamiento coincide con las recientes tensiones con Taiwán y en el mar de China Meridional, escenario cada vez más frecuente de enfrentamientos entre buques chinos y filipinos, lo que podría llevar potencialmente a un conflicto entre Washington y Pekín, y tras la última reunión del Quad, la alianza formada por EE.UU., Japón, India y Australia, para estrechar su cooperación en el Indopacífico.
El lanzamiento de hoy se produce, además, en medio de un incremento de las tensiones con Taiwán a cuenta de la llegada al poder de su nuevo presidente, William Lai (Lai Ching-te), considerado por Pekín un «alborotador» con intensiones separatistas.
China considera a Taiwán como una provincia separatista rebelde desde que en 1949 se retiraron allí las tropas nacionalistas del Kuomintang tras ser derrotadas por el ejército rojo.
Con información de EFE