Un granito puntual, pseudofoliculitis o incluso foliculitis con todas sus consecuencias son algunos de los resultados del vello facial cuando este sale fuerte, se encarna y, a lo mejor, lo manipulamos de una forma poco aconsejable.
Llámalo como quieras, pelo encarnado o vello enquistado, pero cuando esta molestia ocurre no en cualquier parte del cuerpo, sino en la cara, las inseguridades aumentan al quedar expuesto a simple vista. Según el tipo de piel, las rutinas de limpieza, los productos utilizados y la manipulación o método de depilación, el vello más fuerte de áreas como la barbilla o el bigote es más propenso a encarnarse.
Como explica Begoña Núñez, directora de la Clínica Médico Estética Ferraro, el hecho de que el vello facial de esas zonas sea más oscuro y fuerte se explica tanto por su ubicación en sí como por las hormonas.
“La producción de andrógenos, como la testosterona, juega un papel crucial en el crecimiento y las características del vello facial. Los hombres generalmente tienen niveles más altos de andrógenos que las mujeres, por ello su vello facial suele ser más grueso y oscuro”, señala la doctora.
A esto se suma la zona, “áreas como la barbilla y el bigote tienen una mayor densidad de folículos pilosos profundos, que llegan hasta la dermis más profunda. Estos folículos pilosos profundos producen vellos más gruesos y resistentes que los folículos pilosos superficiales que se encuentran en otras partes del cuerpo”.
En comparación con el resto del rostro o zonas como el abdomen, en el caso de las mujeres, cuyo vello es mucho más fino y claro, prácticamente imperceptible, en la barbilla y el bigote, el vello es más grueso y oscuro.
Si te ocurre, puede que hayas pensado en alguna ocasión que el pelo en esas zonas parecía crecer mucho más rápido, la explicación, apunta la doctora, está en que el vello facial tiene un ciclo de crecimiento más largo que el vello corporal, “permanece en la fase anágena (fase de crecimiento activo) durante más tiempo, lo que da lugar a un vello más largo y grueso.
Asimismo, el vello facial, especialmente el vello rizado o grueso, tiene más probabilidades de enquistarse y eso puede causar irritación, inflamación e incluso protuberancias o pseudofoliculitis en la barba”, incide la directora de la Clínica Médico Estética Ferraro.
Es bastante común que este tipo de vello se enquiste al salir, a veces formando granitos, inflamación e incluso llegando a infectarse la piel a su alrededor. La reacción habitual es arrancar el pelo o jugar a ser la doctora Pimple Popper (Sandra Lee), lo que tiene como resultado costras y marcas difíciles de eliminar.
Entre las consecuencias directas del vello facial enquistado, encontramos algunas más fáciles de llevar como enrojecimiento, picazón e irritación, debido a la propia inflamación causada por el pelo atrapado debajo de la piel, pero la zona en la que el vello está enquistado también “se pueden formar pequeños bultitos rojos o rosados, denominados pápulas, que pueden ser dolorosos al tacto”.
Otra reacción puede ser la de que la piel a su alrededor se seque y descame como consecuencia de la irritación.
Estas son las opciones más superficiales, pero, como apunta la doctora Núñez, existen otros efectos secundarios más severos:
Pústulas, pequeñas protuberancias blancas llenas de pus, que pueden ser dolorosas y antiestéticas.
Pseudofoliculitis de la barba. Se caracteriza por la aparición recurrente de vellos encarnados, especialmente en la zona de la barba. Puede causar irritación, inflamación y formación de pústulas, e incluso cicatrices permanentes en algunos casos.
Foliculitis. En casos severos, el vello enquistado puede derivar en una infección del folículo piloso, conocida como foliculitis. Esta infección se manifiesta con enrojecimiento, hinchazón, dolor y, en ocasiones, pus.
La doctora advierte que, si este tipo de consecuencias derivadas del vello facial encarnado no se tratan adecuadamente, pueden incluso dejar cicatrices permanentes en la piel.
Manual de prevención
Mientras la predisposición a tener más vello o el simple hecho de que en esas áreas su tendencia sea a ser más duro y oscuro, hay prácticas diarias o, precisamente, gestos que realizamos cuando nos sabe ese pelito rebelde, que empeoran la situación.
Una de las recomendaciones de la doctora es evitar el afeitado facial, “si es posible, optar por métodos de depilación menos agresivo”, señala. En plataformas como TikTok, donde se busca normalizar este tipo de diferencias corporales, muchas mujeres cuentan su historia con el vello facial, incidiendo en que sus casos empeoraron cuando comenzaron a utilizar la cuchilla.
Una buena forma de prevenir que el vello se encarne es exfoliar la piel de forma regular, “ayuda a eliminar las células muertas y prevenir que los vellos se enquisten”.
Otro aspecto clave que señala la doctora es mantener una correcta hidratación de la piel, lo que mejorará su suavidad y reducirá el riesgo de irritación. Si tienes miedo de obstruir los poros o de que la piel quede muy grasa, opta por hidratantes de textura gel o con ingredientes que te ayuden a equilibrar, pero es importante no cometer el error de resecarla.
La última recomendación de la doctora Núñez es incorporar en la rutina el uso de lociones o cremas con ácido salicílico o glicólico. El ácido salicílico es un betahidroxiácido, al ser liposoluble penetra en el poro y desincrusta la suciedad, la grasa y las células muertas. El ácido glicólico también logra ese efecto exfoliante en las pieles grasas y estimula su renovación.
Aunque el uso de los tónicos está recomendado, lo que se desaconseja es utilizar alcohol sobre la piel del pelo encarnado, puesto que aumenta la irritación y la inflamación.
Por supuesto, en la lista de ‘cosas que no hacer jamás’, la doctora incluye rascar la zona, “se va a irritar aún más y aumentar el riesgo de infección” y tampoco se debe manipular la piel o el vello con métodos caseros como pinzas, agujas u otros.
Cómo tratar el vello enquistado y sus consecuencias
Pero, ¿qué ocurre si esta información llega años tarde? Como explicaba la doctora, algunas de las marcas que surgen como consecuencia del enquistamiento del mismo vello facial una y otra vez, seguido de su extracción, herida y costras, termina por dejar marcas en la piel que puede ser no solo difíciles de eliminar sino imposibles.
A nivel médico, cuando se está padeciendo un pelo encarnado, y en casos de inflamación o dolor severos, el dermatólogo puede inyectar esteroides en la zona afectada, “los esteroides ayudan a reducir la inflamación y el dolor, y pueden aliviar los síntomas rápidamente”, apunta la doctora Núñez.
Otra opción si existe tendencia al enquistamiento son los tratamientos con láser, “se puede tratar con láser la zona para destruir el folículo piloso y evitar el crecimiento futuro del vello enquistado. Este tratamiento es muy efectivo para tratar vellos encarnados recurrentes o pseudofoliculitis de la barba”.
En el caso de que se quiera actuar sobre las marcas que han dejado los vellos enquistados, también existen tratamientos médicos, “en clínicas como la nuestra, manejamos un protocolo personalizado que a grandes rasgos trata a los pacientes con cremas despigmentantes, peelings químicos y tecnologías láser y/o luz pulsada”, indica la doctora.
Tanto el tratamiento láser para eliminar el vello como la despigmentación de las marquitas se pueden realizar en las Clínicas Médico Estéticas Ferraro.
Con información de Vanitatis