En medio de un día caluroso o después de una larga jornada, nada como una bruma facial para refrescar e hidratar la piel. Pero no es necesario gastar dinero en productos comerciales, ya que puedes preparar tu propia bruma facial con ingredientes naturales y sencillos.
Aplicartela te dará muchos beneficios. Entre ellos están que hidratará tu piel aportando una dosis instantánea de hidratación, dejando la piel suave y tersa. Los ingredientes naturales como el aloe vera o el pepino pueden ayudar a calmar la piel irritada o enrojecida.
También puede ser un excelente paso final en tu rutina de maquillaje para ayudar a que el maquillaje dure más tiempo. Y, si tienes la piel grasa, una bruma facial con ingredientes astringentes como el hamamelis puede ayudar a controlar el brillo.
Aquí te presentamos una receta sencilla para una bruma facial refrescante.
Ingredientes
– Agua destilada, 1 taza
– Hidrolato de tu elección (por ejemplo, lavanda, manzanilla, hamamelis), 1 cucharada.
– Glicerina vegetal, ½ cucharadita
– Aceite esencial de tu elección (opcional), 5 gotas
Preparación
- Vierte el agua destilada, el hidrolato y la glicerina en una botella de vidrio con atomizador.
- Si deseas agregar un aceite esencial, agrega las 5 gotas y agita bien para mezclar.
- Etiqueta la botella con el nombre de la bruma facial y la fecha de elaboración.
Consejos de uso
- Agita bien la botella antes de cada uso.
- Rocía la bruma facial sobre tu rostro limpio y seco tantas veces como lo desees.
- Puedes usar la bruma facial antes o después de aplicar tu crema hidratante.
- También puedes usar la bruma facial para refrescar tu rostro después de hacer ejercicio o durante un día caluroso.
Brumas para todo tipo de piel
Grasa: agrega unas gotas de aceite esencial de árbol de té o limón a la receta.
Seca: Incorpora una cucharadita de aloe vera gel a la receta.
Sensible: usa un hidrolato suave como la manzanilla o la caléndula y omite el aceite esencial.
Con información de 2001