Con los 70 millones de dólares que el Banco Central de Venezuela (BCV) vendió a los bancos este lunes 29 de abril, el costo de intervención cambiaria mensual se ubicó en 329 millones de dólares, el segundo más elevado del año desde enero y 56,67% por encima de los 210 millones colocados en marzo.
El BCV decidió reforzar su estrategia de intervención para evitar que el tipo de cambio fuese objeto de presiones alcistas, debido al anuncio del regreso de las sanciones petroleras de Estados Unidos, el cual se hará efectivo al concluir el plazo otorgado por la OFAC, hasta el 31 de mayo, para que las empresas presentes en el país liquiden sus operaciones en el sector hidrocarburos.
El precio establecido para esta intervención -posiblemente, la última de abril- fue de 38,92 bolívares por euro, equivalente a 36,43 bolívares por dólar que es la cotización oficial para todas las operaciones durante este 29 de abril.
En comparación con la semana anterior, este precio subió 0,44%.
Luego de acumular cuatro semanas de caídas seguidas a partir del 18 de marzo, la cotización de intervención tiene tres colocaciones en alza desde el día cuando se anunció la reimposición de sanciones. En este período, el incremento acumulado de este valor es de 0,88%.
BCV: Estrategia reforzada
La estrategia reforzada de intervención cambiaria ha mantenido el incremento semanal del tipo de cambio oficial en menos de 1%; de hecho, en la última semana el alza fue de 0,25%, lo que da cuenta de la continuidad de la estabilización cambiaria en el mercado bancario.
Frente a los datos de 2023, la estrategia de intervención sigue mostrando una mayor eficiencia en 2024. Por ejemplo, el costo para el BCV en abril de este año es menor en 4,91% al registrado en el mismo mes del ejercicio anual pasado.
El monto acumulado de intervención cambiaria en 2024 subió a 1.263 millones de dólares en cuatro meses, 8,81% inferior a los 1.385 millones que el BCV llevaba vendidos a la banca en el mismo lapso de 2023.
Fuentes financieras indican a Banca y Negocios que la relación entre oferta y demanda de divisas sigue siendo adecuada, en buena medida porque hay menos compras de divisas con fines de cobertura, debido a la estabilidad del precio de la divisa estadounidense.
Un ejemplo de esto es la reducción de los depósitos en moneda extranjera que registró la banca durante el mes de marzo y el progresivo descenso de la dolarización de las captaciones del público observado en los últimos meses.
Con información de Banca y Negocios