De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el uso continuado del celular puede provocar consecuencias negativas tanto en el cuerpo como en la mente.
Entre los riesgos físicos, se encuentran lesiones derivadas de la postura corporal adoptada al manipular estos dispositivos, así como el impacto en el sistema nervioso por la sobreestimulación que genera la interacción constante con la pantalla.
La organización internacional advirtió que, si no se regula el tiempo de uso, pueden aparecer diversas patologías, entre ellas tumores cerebrales, síndrome de la contractura en el cuello, síndrome del túnel del carpo y problemas oculares crónicos.
Por qué el uso del celular puede aumentar el riesgo de cáncer
La OMS reportó que los campos electromagnéticos de radiofrecuencia emitidos por los celulares son posibles agentes cancerígenos para los seres humanos. Una investigación de la organización concluyó que existe un indicio de aumento del riesgo de tumores cerebrales en el 10% de las personas expuestas a estos campos.
Este dato ha generado preocupación en la comunidad médica y ha impulsado nuevas investigaciones, sobre los efectos a largo plazo de la exposición a la radiación de los dispositivos.
Cómo el uso del celular puede aumentar los problemas de cuello y otras extremidades
El llamado “Tex neck” o cuello de texto es una de las afecciones más frecuentes relacionadas con la postura. Este trastorno surge por la inclinación constante del cuello al mirar la pantalla del celular, lo que puede derivar en rigidez, dolor de hombros y cefaleas.
Según la información publicada, pueden presentarse contracturas musculares, mareos, alteraciones en el alineamiento de las vértebras, inflamación y dolor en las carillas articulares. Este problema se ha convertido en la enfermedad más común asociada al uso excesivo del celular.
El síndrome del túnel del carpo es otra consecuencia frecuente, originada por la presión excesiva sobre uno de los nervios de la muñeca. Esta presión afecta la sensibilidad y el movimiento en varias partes de la mano. Los movimientos repetitivos y las malas posturas al sujetar el celular contribuyen a la aparición de este síndrome.
Los síntomas incluyen adormecimiento, hormigueo y debilidad en la mano y los dedos. Además, se han detectado lesiones en los tendones de las manos, especialmente en el dedo pulgar, una situación que se observa cada vez más en personas menores de 25 años.
De qué forma el celular puede afectar en la salud ocular de las personas
El uso prolongado de pantallas retroiluminadas tiene efectos negativos en la salud ocular. Mirar la pantalla del celular durante muchas horas o en ambientes oscuros puede dañar la retina de manera progresiva, provocando sequedad, visión borrosa, fotofobia (sensibilidad a la luz) y dolor de cabeza.
Según la información de la OMS, estos síntomas se agravan cuando la exposición ocurre en condiciones de poca luz o durante periodos prolongados sin descanso.
Asimismo, el impacto del celular en el sueño es otro aspecto relevante. Utilizar el dispositivo en la cama reduce la calidad del descanso y puede causar insomnio. La luminosidad de la pantalla activa receptores en el cerebro que inducen la sensación de que aún es de día, dificultando la conciliación del sueño.
La falta de descanso adecuado se traduce en irritabilidad, somnolencia y dificultades de concentración al día siguiente. Incluso el simple hecho de tener el celular cerca disminuye las horas de sueño y afecta la cantidad y calidad del mismo.
Cómo identificar si una persona es adicta al celular
La OMS propuso una serie de preguntas para identificar una posible adicción al celular: revisar el dispositivo al despertar o antes de dormir, sentir la necesidad de responder de inmediato a notificaciones, experimentar miedo a salir de casa sin el celular o percibir vibraciones o sonidos inexistentes.
Si la mayoría de las respuestas a estas preguntas es afirmativa, se podría estar ante una conducta compulsiva relacionada con el uso del teléfono.
La organización subrayó la importancia de limitar el tiempo de exposición a los dispositivos y fomentar hábitos saludables para prevenir estas enfermedades. El uso responsable del celular y la adopción de posturas adecuadas pueden reducir el riesgo de desarrollar estas afecciones, que afectan tanto a jóvenes como a adultos.
Con información de Infobae
