Tras la novela y la película, ‘El Gatopardo’, obra maestra de las letras italianas, resurgirá como una serie de Netflix para, desde el 5 de marzo, llevar al mundo esta apasionante historia de amor y poder, ahora con sus confines ampliados.
“Había algo en este personaje, en todo lo que vive, que me arrastró emocionalmente”, confesó esta semana en la presentación el actor romano Kim Rossi Stuart, llamado a meterse en la piel del ‘Gatopardo’, todopoderoso noble siciliano a quien en el pasado dio vida Burt Lancaster.
La novela ‘El Gatopardo’, publicada en 1957 por Giuseppe Tomasi di Lampedusa, evoca al proceso de unificación de Italia a finales del siglo XIX, el dominio de todos los reinos de la península llevado a cabo por las tropas de ‘camisas rojas’ de Giuseppe Garibaldi.
En la isla de Sicilia (sur de Italia), encrucijada de pueblos mediterráneos durante milenios, el poderoso príncipe de Salina, tótem de la antiquísima aristocracia local, se resiste a estos nuevos tiempos en los que el poder pasará a otras manos e incluso por las urnas.
El imponente señor ve que el futuro de su dinastía está en peligro y, por ello, se ve obligado a estrechar nuevas alianzas, aunque esto vaya en contra de sus soberbios principios.
La obra explora conceptos como el poder, el amor y el precio del progreso, habla de un mundo crepuscular en el que la aristocracia, que durante siglos gobernó la salvaje y hermosa Sicilia, se ve amenazada por esa supuesta modernidad que prometen los unionistas.
La novela se convirtió enseguida en un éxito y poco después fue adaptada al cine por Luchino Visconti, que convirtió a Burt Lancaster en su ‘Gatopardo’, a Alain Delon en su idealista Tancredi y a Claudia Cardinale en la provocadora Angelica Sedara.
Un cóctel de estrellas lleno de barroquismo y pasión con el que el cineasta conquistó la Palma de Oro en Cannes en 1963.
Ahora, la joven actriz italo-francesa Deva Cassel ha heredado el papel de Angelica y el italiano Saul Nanni el de Tancredi. Sin embargo, en esta versión de Netflix, el mundo del ‘Gatopardo’ agranda sus horizontes narrativos y morales.
“El libro es muy interior por lo que el desafío estaba en salir fuera, mostrar los momentos en que se toman decisiones importantes”, explicó el guionista, Richard Warlow, en la rueda de prensa organizada en el monumental salón del Hotel Plaza de Roma, donde se ha rodado la emblemática escena del baile.
Uno de los personajes que prometen más sorpresas es el de la hija del Príncipe de Salina, Concetta, enamorada de su primo Tancredi, pero a quien podría perder por las nuevas alianzas de su padre para afianzar el futuro y prosperidad de su familia en la nueva Italia.
“He sido la que más imaginación ha tenido que usar”, resumió la actriz que la encarna, Benedetta Porcaroli.
Su Concetta es “una chica que vive una evolución antes impensable para poder salir de la protección masculina de su padre”, tratando de “entablar un diálogo igualitario con él”, no solo como un gesto feminista, sino “para poder quererle”.
Esta serie “suntuosa y emocionante” es la gran apuesta de Netflix en Italia y sirve para abordar una trama “extremadamente actual”, en un mundo afectado por los cambios y vaivenes continuos, según explicó la vicepresidenta de contenidos, Tinny Andreatta.
En cualquier caso, ‘El Gatopardo’ rugirá renovado ante los ojos de las nuevas y futuras generaciones, proponiendo al mundo su eterna metáfora, casi un axioma: “Si queremos que todo siga como está, necesitamos que todo cambie”.
Vía: EFE