La discriminación y el racismo en el mercado de alquiler de viviendas en España aumentó casi un 30 % en los últimos cuatro años, con la utilización masiva de ‘prácticas de bloqueo’ por parte de las inmobiliarias para descartar candidatos.
Así lo desvela el informe ‘¿Se alquila? (2) Racismo y segregación en el alquiler de vivienda’ de 2024, que presentó este martes la Asociación Provivienda, financiado por la Secretaría de Estado de Migraciones del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
De hecho, el 99 % de las inmobiliarias en Madrid y Barcelona aceptan requisitos discriminatorios por parte del propietario del inmueble y utilizan prácticas explícitas para bloquear el acceso de personas extranjeras a los pisos de alquiler, frente al 72,5 % registrado en 2020.
El informe es una actualización del estudio realizado en 2020 que pone de manifiesto que, en un momento de escasez de oferta y de alza histórica de precios de alquiler, los requisitos establecidos para acceder a un alquiler en España son claramente discriminatorios.
El estudio se basa en cientos de llamadas a inmobiliarias preguntando por residencias en alquiler en las que la diferencia de atención, requisitos y trato a personas con acento español o extranjero son radicales.
“La diferencia es abismal”, aseguró la responsable de Investigación y Evaluación de Provivienda, Elena Martínez, quien señaló que el 66,7 % de los hogares con una persona de referencia extranjera sufre discriminación, frente a un 24,6 % si la persona de referencia es española.
A través de las llamadas realizadas, se ha comprobado cómo las inmobiliarias aceptan de buen grado los criterios racistas y discriminatorios que plantean los arrendadores y cómo bloquean de manera efectiva a los potenciales inquilinos, ya sea asegurando que la vivienda ya no está disponible, ofreciendo poca información al respecto y exigiendo requisitos distintos según la procedencia.
De hecho, en los últimos años ha surgido un filtro adicional en la forma de las aseguradoras de impagos, que imponen condiciones y exigen un nivel de información y documentación previo muy superior en el caso de inquilinos extranjeros; un seguro que las inmobiliarias recomiendan al arrendador en el 75 % de los casos.
“La mayor parte de las inmobiliarias aceptan realizar un bloqueo absoluto de candidatos extranjeros, especialmente de potenciales inquilinos migrantes por motivos económicos y en situaciones en las que es una mujer la persona de referencia”, subrayó Martínez.
Provivienda propone reforzar la educación y sensibilización de los arrendatarios y la creación de bolsas de vivienda asequible que permita a las personas extranjeras alquilar y establecer una residencia estable y construir un proyecto de vida sin discriminaciones.
Vía: EFE