Mantener una piel nutrida es sinónimo de salud, y esto se consigue a través de una alimentación equilibrada, una correcta hidratación, y por supuesto a través del uso de productos cosméticos e ingredientes naturales.
Una opción que favorece a la mayoría, sin importar el tipo de piel, es el aceite vegetal.
Este producto ha ganado popularidad en los últimos años. Sin embargo, se usan desde tiempos milenarios por sus bondades curativas y embellecedoras. Son derivados de plantas y semillas, y ofrecen una amplia gama de beneficios para la piel.
Beneficios de los aceites vegetales en la piel
– Hidratación profunda. Estos aceites penetran profundamente en las capas de la piel para nutrirla, incluso en las pieles más secas.
– Nutrición. Son ricos en nutrientes esenciales para la piel, como vitaminas A, E y C, que ayudan a nutrirla y revitalizarla.
– Protección contra el envejecimiento prematuro. Los antioxidantes presentes en su composición combaten los radicales libres, responsables del daño celular y la aparición de arrugas.
– Reducción de líneas finas. Algunos aceites, como el aceite de argán y el aceite de jojoba, disminuyen la apariencia de cansancio, bolsas debajo de los ojos, líneas de expresión, entre otras.
– Mejora de la elasticidad. Sus ingredientes contribuyen a la apariencia de la piel, haciéndola más firme y tonificada.
– Calma la piel irritada. En su mayoría cuentan con propiedades antiinflamatorias, como el aceite de lavanda y el aceite de manzanilla. Lo que disipa el enrojecimiento, alivia el picor y la irritación.
¿Cuáles incluir en la rutina de belleza?
1. Aceite de jojoba. Es ligero y no comedogénico, ideal para todo tipo de piel, incluso para las pieles grasas. También es rico en vitaminas E y B. Gracias a sus propiedades antioxidantes se usa en el tratamiento para el acné.
2. Aceite de argán
Es rico en ácidos grasos esenciales y vitamina E, que regeneran la piel. Incluso se le conoce como el “oro líquido” por la variedad de propiedades que aporta.
3. Aceite de rosa mosqueta. Regenera e hidrata la piel. Es muy conocido por sus propiedades cicatrizantes y regeneradoras. Además, repara la epidermis y da permeabilidad y elasticidad, aclara manchas, cicatrices y estrías.
4. Aceite de coco. Combate los signos del envejecimiento al promover la producción natural de colágeno. Protege la piel del daño ambiental y es ideal para pieles secas y sensibles.
Con información de 2001