Permanecer durante 20 minutos en un bosque puede ser suficiente para lograr una reducción “medible” del estrés y contribuir así al “bienestar psicológico”, según un estudio realizado por la Universidad de Medicina de Viena.
Los resultados de la investigación “muestran claramente que incluso una breve estancia en el bosque mejora el estado de ánimo”, afirmó la experta en medicina ambiental Daniela Haluza en un comunicado.
El estudio publicado en la revista Forests el 8 de mayo, separó a 66 adultos en dos grupos. Mientras que el primer grupo pasó 20 minutos en el Bosque de Viena, el otro grupo estuvo en un entorno urbano sin vegetación.
Tanto antes como después de la estancia de ese lapso de tiempo, los investigadores tomaron muestras de saliva de los participantes para medir el nivel de cortisol, que es un indicador del estrés.
Los datos demostraron que los niveles de cortisol se redujeron de unos 4 a 2 nanogramos por mililitro en los individuos que estuvieron en el bosque.
Además, las emociones positivas disminuyeron en un 25 % en los participantes que permanecieron en un entorno urbano, frente al 12 % registrado en el otro grupo,”lo que indica un alivio notable de las emociones negativas” en quienes se encontraron rodeados de árboles.
“Nuestro estudio en el Bosque de Viena confirma que los paisajes forestales cercanos a la naturaleza pueden contribuir de forma medible a la reducción del estrés y al bienestar psicológico”, declaró Haluza.
El equipo de investigación destacó la necesidad de que todo el mundo pueda acceder a espacios recreativos, “ya que no todas las personas pueden hacer excursiones frecuentes a las montañas o permitirse vacaciones costosas, pero un breve paseo por el bosque es factible para muchos”.
Vía: EFE