Elegir un traje de baño adecuado después de los 40 años puede ser una tarea desafiante, pero no tiene por qué serlo. Existen múltiples estilos diseñados para brindar comodidad, realzar la silueta y hacer que cualquier mujer se sienta segura y elegante en la playa o la piscina.
1. Una pieza
Los trajes de baño de una pieza son una opción clásica y favorecedora. Ofrecen mayor cobertura y soporte, especialmente aquellos con copas preformadas o paneles de control abdominal. Los diseños con escotes en V estilizan el torso, mientras que los modelos con drapeados o fruncidos ayudan a disimular el abdomen.
2. Tankinis
Combina la comodidad de un bikini con la cobertura de un bañador entero. Consiste en un top largo y una braguita, lo que permite mayor flexibilidad al momento de vestir. Es ideal para quienes desean ocultar el área del vientre sin renunciar a la comodidad de un traje de dos piezas.
3. Bikinis con soporte
Para aquellas que prefieren los bikinis, existen modelos diseñados para brindar mayor sujeción y realce. Los tops con aros, tirantes anchos o estilo halter proporcionan soporte adicional al busto, mientras que las braguitas de talle alto estilizan la figura y ofrecen mayor cobertura en la zona del abdomen.
4. Faldas o pareos incorporados
Estos diseños con falda, conocidos como swim dresses, son una excelente opción para quienes buscan un toque de elegancia y comodidad. Brindan cobertura adicional en las caderas y muslos, además de ser muy femeninos. También existen modelos con pareos incorporados que permiten ajustar el nivel de cobertura.
5. Estampados y colores favorecedores
Los colores oscuros, como el negro, azul marino o burdeos, tienen un efecto adelgazante y estilizan la figura. Sin embargo, los estampados estratégicos, como los florales o geométricos en zonas específicas, pueden ayudar a equilibrar la silueta y resaltar los puntos fuertes del cuerpo.
6. Telas y detalles estructurados
Los materiales con control de compresión ayudan a definir la figura, mientras que los detalles como volantes, cinturones o costuras estratégicas pueden desviar la atención de ciertas áreas y realzar otras.
Con información de 2001
