Decenas de estudiantes de la Universidad de La Sapienza de Roma han iniciado este miércoles una huelga de hambre contra los acuerdos de cooperación académica con Israel, tras el arresto de dos manifestantes en una protesta en la que se registraron enfrentamientos con la policía, uno de cuyos agentes resultó herido.
Las estudiantes que ayer se encadenaron ante el rectorado, junto a los que habían acampado desde hace días en los jardines de la universidad, han comenzado la huelga de hambre con un llamamiento «para detener el genocidio en Palestina».
«Hemos llegado a esta forma de protesta no violenta tras meses de una movilización heterogénea y generalizada que ha visto cómo diversos sectores de la sociedad se posicionaban claramente en contra de las guerras, a favor de un alto el fuego», pero la contrapartida han sido «las porras y a la violencia represiva contra los estudiantes», según el grupo «Cambiare Rotta», organizador de la protesta.
Tras destacar que sus protestas para «poner fin a la colaboración en investigación y enseñanza que vinculan la educación a la industria bélica y a Israel» han «obtenido algunas victorias importantes en algunas universidades como Turín, Pisa, Bari, Nápoles y Milán», abogan por que suceda lo mismo en La Sapienza.
«Nuestro país todavía no está dispuesto a trabajar para construir las condiciones para la paz, pero no hay tiempo. Estamos encadenados y en huelga de hambre ante el rectorado porque es desde el corazón de la universidad más grande de Europa donde dar un paso atrás a los cómplices de un genocidio puede producir un cambio importante», añaden.
Además de en La Sapienza, decenas de estudiantes también se han concentrado esta mañana ante el Tribunal de Roma para protestar contra la detención de dos jóvenes tras los enfrentamientos de ayer con la policía en la Universidad, cuando unos 300 manifestantes intentaron acceder al rectorado antes de volver a intentar irrumpir en una comisaría, cuyo responsable resultó herido.
«Condena total por la violencia ocurrida hoy por parte de los colectivos en Roma. Devastación, atentados, enfrentamientos, ataques a un rectorado y a una comisaría, con un dirigente golpeado. Esto no es manifestación, sino delito. Mi solidaridad con el director de policía que fue agredido, con todos los cuerpos policiales y los docentes», publicó anoche la primera ministra, Giorgia Meloni, en sus redes sociales.
Con información de EFE
