En el municipio Obispos del estado Barinas se realizó una visita técnica a diversas unidades de producción, con la finalidad de evaluar sus prácticas y promover la protección de la identidad cacaotera mediante las Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP).
La información fue publicada en el canal oficial de Telegram del Servicio Autónomo de la Propiedad Intelectual (SAPI), donde se destacó que “celebramos el compromiso de nuestras productoras y productores cacaoteros”.
Del mismo modo, agradecieron la dedicación y el rescate de técnicas ancestrales, para que el cacao venezolano «mantenga su calidad excepcional y su invaluable herencia histórica”.
La Indicación Geográfica Protegida (IGP) es un sello que identifica un producto como originario de un lugar específico y se otorga a productos que tienen una cualidad, reputación, u otra característica atribuible a su origen geográfico.
Con información de VTV
