La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, informó que el Gobierno suspenderá vuelos de deportación desde Estados Unidos. Los migrantes vuelven al tablero de la negociación.
El rompimiento del acuerdo de Barbados por parte del Tribunal Supremo de Justicia al no levantar inhabilitaciones políticas contra dirigentes de la oposición generó que Estados Unidos vuelva a poner sanciones empresas del Estado.
Vuelos de deportación desde Estados Unidos
Ante esto, Rodríguez declaró: “si dan el paso en falso de intensificar la agresión económica contra Venezuela, a pedido de los extremistas lacayos en el país, a partir del 13 de febrero quedarían revocados de manera inmediata los vuelos de repatriación de migrantes venezolanos y pasarían a revisión cualquier mecanismo de cooperación existente como contramedida frente al deliberado intento de golpear a la industria del petróleo y gas venezolano”.
Migrantes como fichas de una negociación
Ante lo dicho por la vicepresidenta, varias reacciones se generaron en contra de la medida. Una de ellas fue la de Susana Rafalli, la experta en nutrición y trabajo social, quien escribió en su cuenta de X: “Usar como fichas de negociación en el tablero, el destino de migrantes venezolanos por ser deportados y los mecanismos de cooperación que alivian a tanta gente, no es tan glorioso como se aclama”.
Por su parte, la presidenta de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA, en inglés), Carolina Jiménez, habló del tema sobre cifras de migración y deportación.
Jiménez explicó que desde el comienzo de los vuelos, en octubre de 2023, al 21 de enero, hubo 14 viajes. Si se calculan 150 personas por vuelo, el total aproximado es 2.100 personas.
En contra posición, sólo en diciembre del año pasado, 57.869 migrantes de Venezuela llegaron a frontera sur de los Estados Unidos.
De igual forma, de las 520.085 personas migrantes que cruzaron el Darién en 2023, el 63 % eran de Venezuela (328.000). La crisis migratoria continúa, a pesar de las políticas migratorias y de la forma en que los gobiernos negocian con los migrantes.
En este sentido, Carolina Jiménez recordó algunos factores de expulsión en la crisis de migración forzada, destacó la emergencia humanitaria compleja y la grave violación a los Derechos Humanos.
Atacar las causas pasa por resolver la crisis humanitaria como por garantizar una transición negociada y pacífica a la democracia.
Con información de Radio Fe y Alegría