Un incendio forestal declarado en la ciudad canadiense de Squamish, cercana a Vancouver, mantiene este jueves a más de 200 edificios en alerta para ser evacuados si la situación se agrava, según el último parte difundido por los Servicios locales de bomberos.
Las autoridades declararon el estado de emergencia el pasado martes, cuando se inició el fuego en la zona de Dryden Creek, y el departamento de gestión de emergencias del distrito de British Columbia alertó a los residentes de que debían estar preparados para tener que abandonar el lugar «con poco aviso».
El Servicio de Bomberos de la zona indicó ayer que unos niveles más elevados en la humedad de esa área habían ayudado a las unidades de bomberos a combatir el fuego.
En una rueda de prensa celebrada anoche, de la que se hacen hoy eco los medios locales, el responsable de la Brigada de incendios de Squamish, Marc Simpson, consideró que sus unidades están «en mejor posición» ahora para luchar contra las llamas.
También el alcalde de Squamish, Armand Hurford, dijo que la población está «segura» en estos momentos, ya que «los desafíos se encuentran muy localizados» si bien consideró que los residentes de la zona impactada deben estar listos para dejar sus hogares «con poco aviso».
El fuego ha consumido más de 3,3 millones de hectáreas hasta ahora, lo que equivale al tamaño de Bélgica.
Con información de EFE