El grupo de la Izquierda en el Parlamento Europeo (PE), del que forman parte Izquierda Unida y Podemos, ha decidido introducir para su personal la baja por menstruación y ha pedido que esa política se extienda al conjunto de la Eurocámara.
El grupo político indicó este miércoles en un comunicado que el paso que ha dado pretende «mejorar el bienestar de las trabajadoras reconociendo las necesidades y abordando el estigma asociado a la menstruación».
En octubre de 2023 la Izquierda en la Eurocámara ya puso a prueba la baja por menstruación para su personal.
«Tras el periodo de prueba, y a la luz de las respuestas positivas del personal, la baja por menstruación ha sido oficialmente establecida entre los otros tipos de bajas médicas», señaló el grupo.
Con esta nueva política las trabajadoras pueden estar de baja hasta tres días al mes sin un justificante médico y, de forma alternativa, también tienen derecho a trabajar desde casa tres días adicionales por semana, si así lo desean.
En los cinco meses que se ha aplicado la política ha sido usada un total de trece veces por seis personas diferentes de las 92 que componen la plantilla.
Esas cifras demuestran, según el grupo de la Izquierda, que la baja por menstruación se ha usado según la necesidad.
«Aproximadamente la mitad de nuestro personal menstrúa y, para algunas, esto puede ser un desafío. Queremos que nuestro lugar de trabajo refleje las políticas y los principios que defendemos: promover los derechos de los trabajadores y las mujeres de manera más general. Esto significa crear un entorno de trabajo inclusivo y libre de estigmas”, declaró el secretario general de la Izquierda en la Eurocámara, Francisco Orozco Dopico.
Afirmó que están animando a los demás grupos políticos y a la administración del Parlamento Europeo a implementar medidas similares.
El grupo realizó una encuesta a 39 personas y señaló que cuatro de ellas tenían la percepción de que pedir la baja por menstruación «podría afectar negativamente a la carga de trabajo o su relación con compañeros o la dirección».
«Para el pequeño número de trabajadoras que estaban preocupadas por las repercusiones, esto muestra que las mujeres a menudo sufren físicamente, pero se sienten culpables por pedir la baja por menstruación. Así que definitivamente hay más trabajo por hacer para normalizar este tipo de políticas», dijo Orozco Dopico.
La idea de la baja por menstruación ha planeado durante décadas en países como Japón, Corea del Sur, Taiwán e Indonesia, según el grupo político de la Izquierda.
En Japón se introdujo en la legislación laboral en 1947, mientras que España fue en 2023 el primer país europeo con una ley que permite a las trabajadoras una baja por menstruación de hasta cinco días al mes con justificante médico.
Con información de EFE
