La salud mental es el estado de equilibrio que debe existir entre las personas y el entorno que le rodea, es el bienestar emocional, psíquico y social, y esto influye en cómo piensa, actúa y reacciona una persona.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la salud mental “es un estado de bienestar por medio del cual los individuos reconocen sus habilidades, y son capaces de hacer frente al estrés normal de la vida, trabajar de forma productiva y fructífera, y contribuir a sus comunidades.
Cuidarla es esencial no solo porque ayuda a controlar el estrés, también disminuye el riesgo de contraer enfermedades y aumentar el nivel de energía. Expertos señalan que hasta algunas pequeñas acciones de autocuidado en su vida diaria pueden generar un gran impacto.
La salud mental y la tecnología
Como mencionamos, esta acción ayuda a reducir el estrés, mejorar el estado de ánimo, aumentar la autoestima y mejorar la resiliencia.
Si estás pensando en mejorar tu calidad de vida esto es esencial, y en la era digital en la que vivimos, mucho más.
Aunque la tecnología ha favorecido en muchos aspectos de la vida, la verdad es que también puede tener efectos negativos que repercuten en el bienestar psicológico. Expertos indican que el uso excesivo de la tecnología puede afectar la salud mental.
Por ejemplo, el uso excesivo de teléfonos inteligentes y computadoras, puede llevar al aislamiento social, y esto puede contribuir a la soledad y la depresión.
También puede generar ansiedad, estrés e incluso problemas para conciliar el sueño.
Es decir, muchas personas sin darse cuenta dependen de la tecnología y esto repercute de manera negativa no solo en su bienestar, sino en la salud física y mental.
Hablan los expertos
Diferentes estudios al respecto indican que la dependencia tecnológica no solo es una gran distracción, sino que, además, propicia una baja autoestima, retrasa el desarrollo sobre todo en los niños, fomenta conductas agresivas y hasta puede causar problemas psicológicos.
En tal sentido, la recomendación de los expertos es limitar el uso de dispositivos tecnológicos, pues una buena salud digital, repercute de manera favorable en la salud mental de grandes y chicos.
Para lograrlo, crea espacios sin tecnología, practica la meditación, comparte con familiares y amigos, realiza algún deporte y disfruta de tus hobbies,
