La llegada del verano no hace más que hacer más visibles las respuestas de nuestro organismo ante las altas temperaturas o los rayos de sol, siendo la piel la más rápida en mostrar señales.
Tanto si apenas el sol roza tu piel unos minutos mientras vas por la calle, como si practicas deporte al aire libre o si has pasado una jornada en la piscina, en la playa o en la montaña, el resultado suele ser una piel enrojecida, reactiva, palpitante, sudorosa y que pide clemencia.
Es entonces cuando entran en el juego los cosméticos after sun (formulados para aplicarse tras la exposición solar) o el aloe vera. La lista de remedios post sol se amplía con la caléndula.
Puede que no te suene nuevo, y es que no es un uso especialmente novedoso, sin embargo, la fama internacional de la flor de la caléndula y su larga lista de propiedades ha hecho que, cada vez más cosméticos la incluyan, siendo especialmente recomendada para pieles sensibles, enrojecidas, irritadas, inflamadas… Pieles que acaban de estar recibiendo una considerable dosis de sol.
La caléndula se usa en la medicina tradicional y natural desde hace siglos por sus propiedades calmantes y regeneradoras, por lo que no es de extrañar que ahora encontremos cremas after sun, tónicos o hidratantes infantiles formulados con la flor.
Tratamientos como el ‘seven skin method’, que se apoyaba en la aplicación de 7 capas de tónico para momentos en los que la piel pedía a gritos hidratación y calma, los tónicos con extracto de caléndula eran especialmente efectivos.
Esto se debe, como explica la farmacéutica y colaboradora de Marnys, María Esther García de la Cruz, a que “la caléndula posee propiedades regeneradoras y antiinflamatorias, por lo que su extracto en forma de aceite calma y suaviza la piel a la vez que ayuda a la regeneración natural de la piel después de la exposición solar”.
La clave de este efecto está en la flor de caléndula, “es rica en flavonoides, resinas y glucoproteínas que favorecen la formación de colágeno de la piel”, apunta la experta.
Estas cualidades regeneradoras, además de la calmante y suavizante, convierten a la caléndula en un aliado ideal para el cuidado de la piel después de la exposición al sol. En plataformas sociales como TikTok, Instagram o TikTok es habitual ver recetas para elaborar bálsamos o tónicos de caléndula caseros. La recomendación de la farmacéutica, para lograr una mejor penetración y una mayor hidratación, es utilizar aceites de caléndula.
“Sus activos penetran profundamente en la piel para favorecer la reparación, e hidratación, lo que permite una piel más sana y revitalizada tras ser expuesta a los rayos solares”, entre sus recomendaciones está el Aceite Calmante de Caléndula de Marnys que, además, es apto para toda la familia, ya que pueden utilizarlo niños a partir de 3 años.
“Es 100% vegetal formulado para todo tipo de pieles, especialmente pieles sensibles con tendencia a irritarse o las que tienen dermatitis. Combina extractos de caléndula y abedul, que calman, suavizan y ayudan a la regeneración natural de la piel, junto con extractos de aceites esenciales cítricos que aportan una fragancia fresca y veraniega, ideal para después de un día de playa o piscina”, precisa.
En el terreno de las redes, por supuesto, la experimentación no solo lleva a juguetear con la elaboración de un aftersun natural y económico, también hay quienes comparten que los bálsamos y las lociones de caléndula son útiles para que las pieles más sensibles y/o claras no se pelen tras quemarse al sol.
«El aliado para las pieles danesas», apuntaba la titoker Shannon Peggy, experta en acupuntura, mientras explicaba que, si se quemaba su piel clara y se aplicaba su hidratante con caléndula, la quemadura se calmaba y la piel no se pelaba, sino que al cabo de unos días, se convertía en un tono bronceado.
Como remedio para quemaduras, las propiedades calmantes y regenerativas asociadas a la caléndula encajan con lo descrito por la tiktoker, pero por supuesto, la recomendación es mantenerse alerta ante el sol y evitar que haya quemadura.
Los cosméticos con caléndula no tienen por qué utilizarse solo cuando el mal está hecho, como explica la farmacéutica, «para quienes desean una piel hidratada, nutrida y con un bronceado saludable, brillante y luminoso durante este verano, este aceite de caléndula es perfecto.
Aplícalo siempre después de la exposición al sol tras la ducha con un suave masaje hasta su absorción. Por último, si buscas un glow durante las salidas nocturnas de verano, el aceite se emulsiona perfectamente con sublimadores o partículas doradas, brindando hidratación y emparejando el tono de la piel», recomienda María Esther García.
Para texturas más ligeras y una rápida absorción, si por ejemplo quieres calamar la piel del rostro tras la exposición al sol, otra opción son los tónicos. Archiconocido por todos y seguido de una completa línea de caléndula, el Calendula Herbal Extract Toner de Kielh’s es un infalible.
Puedes ver los pétalos infusionados en el interior, no lleva alcohol, así que no reseca, no queda pegajoso, admite el capa sobre capa y deja la piel calmada e hidratada. Pero, como decíamos, las propiedades tan favorables y «para todos los públicos» de la caléndula han contribuido a que no solo se cuele, sino que se convierta en el ingrediente estrella de líneas de cuidado infantil, como toda la gama Baby de Weleda (formulada al completo con caléndula) o Musetala con productos como el Gel Árnica y Caléndula Bio, especialmente desarrollado para irritaciones y rozaduras en la piel de los bebés.
Con información de Vanitatis
