Tener un cabello saludable y bien cuidado no solo aporta confianza y realza la imagen personal, sino que también refleja un buen estado de salud general, ya que es un indicador de la nutrición y el bienestar del cuerpo. Además, un pelo atractivo ofrece un amplio campo para la expresión y la creatividad a través de diferentes estilos y colores, permitiendo a cada persona destacar su individualidad y estilo único.
Muchas veces no sabemos cómo cuidar nuestro cabello de la mejor manera y qué hacer si tenemos la melena rizada o queremos hacer un cambio rotundo en nuestro estilo. No te detengas y sigue leyendo así descubrirás mitos o verdades muy interesantes.
1- Mito: el cabello rizado no crece
El mito de que el cabello rizado no crece es solo eso: un mito. En realidad, el cabello rizado crece a un ritmo similar al de otros tipos de cabello, media pulgada por mes, pero su estructura única puede dar una impresión diferente. Veamos por qué existe este mito y cómo cuidar adecuadamente del cabello rizado.
¿Por qué la gente piensa que el cabello rizado no crece?
Encogimiento (Shrinkage). Los rizos tienden a retraerse y encogerse debido a su estructura en espiral, lo que puede hacer que parezca que no crece tanto como el cabello liso.
Quiebre fácil. El cabello rizado es más propenso al quiebre debido a su textura. Los puntos donde se forman los rizos son naturalmente más débiles y susceptibles a daños.
Dificultad para notar el crecimiento. Debido a su forma en espiral, puede ser más difícil notar visualmente el crecimiento del cabello rizado en comparación con el cabello liso.
Cuidados especiales para el cabello rizado
Hidratación. El cabello rizado tiende a ser más seco que otros tipos. Es crucial mantenerlo bien hidratado usando acondicionadores y mascarillas hidratantes. Los aceites naturales como el de coco o argán también son excelentes para nutrir los rizos.
Desenredar con cuidado. Utiliza un peine de dientes anchos o tus dedos para desenredar el cabello rizado. Hazlo siempre con el cabello húmedo y con acondicionador para minimizar el quiebre.
Evitar el calor excesivo. El calor puede ser particularmente dañino para los rizos. Opta por secar al aire libre en lugar de usar secadores, y si debes usar calor, asegúrate de aplicar un protector térmico.
Cortes regulares. Aunque parezca contradictorio, los cortes regulares ayudan a mantener la salud del cabello rizado y promueven su crecimiento al eliminar las puntas abiertas y dañadas.
Evitar químicos duros. Los tratamientos químicos, como alisados, pueden dañar la estructura natural del rizo. Opta por opciones más suaves o naturales para cuidar tus rizos.
Utilizar productos específicos para rizos. Existen líneas de productos diseñadas específicamente para el cabello rizado. Estos productos ayudan a definir los rizos y mantenerlos saludables.
Técnicas de peinado de bajo mantenimiento. Técnicas como “plopping” (secar el cabello con una camiseta de algodón) o “pineappling” (recoger el cabello en lo alto de la cabeza) pueden ayudar a mantener los rizos definidos y libres de frizz.
En conclusión, el cabello rizado sí crece, pero su naturaleza única requiere cuidados especiales para mantenerlo saludable, hermoso y visible en su crecimiento. Adoptar una rutina de cuidado adaptada a las necesidades específicas de los rizos es esencial para disfrutar de un cabello rizado largo y saludable.
2-Verdad: el ácido fólico ayuda al cabello con el volumen, brillo y crecimiento
El ácido fólico, conocido también como vitamina B9, juega un rol importante en la salud del cabello. Su influencia en el volumen, brillo y crecimiento del cabello se debe a varios factores biológicos y nutricionales:
Promoción del crecimiento celular y la renovación
Crecimiento celular. El ácido fólico es crucial en la creación de nuevas células. Esto incluye las células del folículo piloso, que son responsables del crecimiento del cabello.
Renovación del cuero cabelludo. Al promover la salud y renovación celular en el cuero cabelludo, el ácido fólico puede contribuir a un crecimiento de cabello más sano.
Producción de ADN y ARN
Síntesis de ADN. El ácido fólico es esencial en la formación de ADN, el material genético que guía la salud y la función celular.
Impacto en los folículos pilosos. Una adecuada síntesis de ADN asegura que los folículos pilosos funcionen eficientemente, promoviendo un crecimiento saludable del cabello.
Metabolismo de aminoácidos
Síntesis de keratina. El ácido fólico interviene en el metabolismo de ciertos aminoácidos necesarios para la producción de keratina, un componente clave del cabello.
Fortalecimiento del cabello. La keratina fortalecida puede dar al cabello una apariencia más voluminosa y brillante.
Colaboración con otras vitaminas B
Función en conjunto. El ácido fólico trabaja junto con otras vitaminas del complejo B, como la biotina (vitamina B7), para mejorar la salud general del cabello.
Efectos sinérgicos. Esta colaboración puede resultar en un cabello más fuerte, más brillante y con mayor volumen.
Prevención de la caída del cabello
Circulación sanguínea. El ácido fólico ayuda a mejorar la circulación sanguínea en el cuero cabelludo, lo que puede estimular los folículos pilosos y prevenir la caída del cabello.
Nutrición del folículo. Una mejor circulación asegura que los nutrientes y el oxígeno lleguen a los folículos, favoreciendo su salud y resistencia. El ácido fólico es un nutriente vital que contribuye al crecimiento, brillo y volumen del cabello a través de su participación en la renovación celular, la síntesis de ADN y ARN, y el metabolismo de aminoácidos necesarios para la producción de keratina.
Además, su papel en mejorar la circulación sanguínea en el cuero cabelludo y en colaborar con otras vitaminas B amplifica sus beneficios para la salud capilar. Por ello, una dieta equilibrada que incluya suficiente ácido fólico es fundamental para mantener un cabello saludable.
Con información de Infobae