El presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko, se reunió este jueves en Minsk con el primer ministro chino, Li Qiang, al que aseguró que su país está preparado para la «gran llegada» de tecnologías del gigante asiático.
«Propongo que el objetivo principal de los gobiernos de los dos países a medio plazo, hasta 2030, sea la implementación de la gran llegada de tecnologías chinas a nuestra república», dijo Lukashenko a Li, según recoge la agencia estatal BELTA.
El interés de Minsk en Pekín se debe a sus grandes logros, explicó.
«Han creado su propio sistema de navegación global. Construyeron el telescopio más grande del mundo. Diseñaron una estación orbital y un avión de fuselaje ancho. China es líder en la producción de baterías, paneles solares, trenes de alta velocidad, vehículos eléctricos y otros productos», afirmó Lukashenko.
A la vez, aseguró que Bielorrusia también puede presumir de sus «altas competencias en microelectrónica, ingeniería mecánica e industria espacial».
El país eslavo, agregó, tiene «enormes capacidades científicas y técnicas, incluido el sector informático».
Lukashenko insistió en que el objetivo principal ahora es equiparar el nivel de la cooperación económica con China al que tienen los lazos políticos.
En este sentido, subrayó que, pese a la distancia geográfica, las partes están «unidas en su valoración del pasado y las posturas sobre la situación política actual».
Según Minsk, durante los últimos 17 años con la ayuda de China se han implementado en Bielorrusia 27 proyectos industriales estratégicos por valor de más de 5.000 millones de dólares.
Li, por su parte, afirmó que Bielorrusia y China profundizan constantemente la cooperación política y aumentan la interacción empresarial.
«Durante los 32 años transcurridos desde el establecimiento de relaciones diplomáticas, la cooperación entre China y Bielorrusia, independientemente de la situación externa, siempre ha demostrado vitalidad y energía», afirmó.
El primer ministro chino llegó a Bielorrusia procedente de Moscú, donde se entrevistó con el presidente ruso, Vladímir Putin, y firmó un acuerdo en materia de inversión.
El primer ministro chino aseguró a Putin que el gigante asiático está dispuesto, en medio de «la cambiante situación internacional», a avanzar junto a Rusia «de manera más firme» en la línea marcada por los mandatarios de ambos países por el bien de sus pueblos y también «por la justicia en todo el mundo».
Con información de EFE