¿Alguna vez te has preguntado cómo el simple hecho de cambiar la hora en que te ejercitas o descansas podría mejorar tu salud cardíaca? Según un reciente estudio de la Universidad de Florida, Estados Unidos, mantener ritmos de actividad diaria y descanso puede tener un impacto significativo en la capacidad cardiovascular y eficiencia al caminar, especialmente en adultos mayores.
La investigación, que analizó los movimientos diarios de 799 personas con una edad promedio de 76 años, utilizó dispositivos de muñeca para registrar la actividad física durante una semana. Los especialistas examinaron diversas métricas, como la diferencia entre los niveles de actividad durante el día y la noche, así como la regularidad de estos patrones a lo largo del tiempo.
Los participantes también realizaron pruebas para medir su capacidad cardiorrespiratoria y eficiencia al caminar. Utilizaron caminatas en cinta rodante y evaluaciones de energía durante la marcha para realizar el análisis.
En este sentido, se pudo conocer que los resultados sorprendieron a los investigadores. Aquellos adultos mayores que mantenían patrones regulares de actividad y descanso por las mañanas mostraron una mejor salud cardíaca y pulmonar en comparación con quienes tenían horarios más irregulares o entrenaban más tarde.
Estas asociaciones se mantuvieron incluso después de considerar factores como:
- Edad
- Nivel general de actividad física
- Calidad del sueño
- Masa corporal
- Enfermedades crónicas.
Sugerencias para mejorar la salud cardíaca
Los científicos sugieren que establecer horarios constantes para la actividad diaria junto con intervenciones como la exposición a luz natural o ejercicio matutino, podría beneficiar la función física en etapas avanzadas de la vida.
Sin embargo, advierten que se necesita más investigación para determinar si modificar el horario de actividad diaria puede tener efectos positivos en la salud y si estos beneficios también se extienden a personas más jóvenes.
Fuente: Medios Digitales
