¿Quieres cuidar tu piel pero no sabes por dónde empezar o que debes utilizar? Te entendemos perfectamente, hoy en día existen muchos productos para mantener el cuidado de la piel en la ducha nosotros te vamos a explicar que son estos productos y cuando deberías usarlos.
El gel de baño y jabón líquido:
El gel de baño es una emulsión jabonosa con fragancia añadida, hidrantes y suavizantes, cumple la misma función que el jabón líquido, la diferencia es que este último, esta hecho a base de aceites naturales de origen vegetal, permitiendo limpiar sin resecar la piel, caso contrario al gel de baño que esta formulado con tensioactivos sintéticos, aunque pudiera dejar una sensación grasa de hidratación por los productos grasos incorporados. No obstante, ambas soluciones sirven como exfoliante ya que generalmente se utilizan con esponjas que ayuda a remover las células muertas.
Exfoliante:
Dermatólogos recomiendan exfoliar la piel durante la ducha y sugieren hacerlo de manera circular desde los pies hasta el pecho al menos dos o tres veces por semana, va a depender de sus compuestos, igualmente en la etiqueta de cada frasco están las indicaciones que es importante tomar en cuenta. La especialista Esther Sansi, asegura que este proceso también activa la circulación del sistema linfático y oxigena la piel.
Ahora que tienes conocimiento de estos productos y sus funciones vamos a dejarte unos pasos para el correcto cuidado de la piel en la ducha para que al aplicar otros productos como aceites y cremas tenga mayor impactoven la epidermis.
- Lo primero a considerar es la temperatura del agua que no debe ser ni muy fría ni muy caliente para que penetre correctamente en la piel produciendo cambios en la barrera cutánea.
- Considera que tipo de piel tienes y elige la solución jabonosa que prefieras, ten en cuenta que pieles secas requieren hidratación y reparación, para pieles sensibles es recomendable productos 100% naturales y en caso de tener piel grasa, te conviene usar un jabón con propiedades de aclarado.
- Exfolia siguiendo las instrucciones del frasco.
- Termina la ducha con agua fría para descongestionar y tonificar la circulación sanguínea.
Al secarte, no frotes la toalla sobre la piel, seca con toques para permitir que la piel retenga humedad.
Con información de 2001
