La escasez de gasolina en los pueblos del sur causa la pérdida de cosechas, incluso, la muerte de personas que por no tener combustible en los vehículos no pudieron ser trasladadas a centros de salud. El alcalde Omar Fernández, del municipio Arzobispo Chacón, denunció que llevan meses en una crisis de combustible que ha provocado la pérdida de sus productos agrícolas.
“El turismo y el comercio han caído de gran manera, el aparato agroproductivo y productivo están prácticamente en el suelo. La gente está perdiendo su cosecha”, dijo Noel Flores, representante de la Zona de Defensa Integral (ZODI) Mérida, en una visita realizada al sector. Las solicitudes hechas en octubre siguen sin respuesta este 1 de diciembre.
En esta zona no solo se necesita gasolina para el transporte de alimentos, también se usa para mover tractores, motores de fumigar y cosechadores. Milena Contreras, presidenta de la Sociedad de Empresarios del Campo del Occidente de Venezuela, considera que con la falta de combustible los han sometido a un tipo de violencia contra los derechos humanos.
“No solo se ha quebrado el sector agrícola, ganadero y transporte pesado. Nos han negado el derecho a la vida. En una emergencia no tenemos cómo trasportar a los habitantes hasta la ciudad para que sean atendidos en el hospital. Se han perdido vidas de mujeres dando a luz, se han muerto personas de peritonitis e infartos”, sostuvo Contreras.
Una de sus preocupaciones ante esta necesidad es la salud física y mental de los abuelos del campo, que han dejado sus chequeos médicos por la falta de transporte al igual que las mujeres sin posibilidad de controles ginecológicos, mamografía o citología.
Quienes logran adquirir un litro de gasolina es por la reventa, al mismo precio que en Pueblo Llano, de los ciudadanos que llegan en moto hasta los pueblos. “En un municipio sin ingresos cómo pagas una carrera en carro particular”, alega Contreras.
Durante al menos 107 días sin gasolina en este municipio, donde habitan 16.000 personas, de las cuales 12.000 son agricultores, Milena Contreras ha visto morir a sus paisanos.
“Me tocó ver morir a un bebé hace un mes, iba de Canaguá la mujer y el niño estaba muerto debido al tiempo que tardaron buscando combustible. De esta misma forma ya han llegado a Mérida cinco niños sin vida. Es una injusticia e inhumano. El llamado es ante la Corte Penal Internacional para que nos ayuden”, agregó.
Como trabajadora del campo le ha tocado perder toneladas de rubros agrícolas. “Ahora es un delito grabar, pero ha tocado dejar podrir los barbechos, lo que representa la contaminación de suelos y nacientes de agua que luego serán ingeridas por los habitantes, lo que desata las moscas que causarán enfermedades”, afirmó Milena Contreras.
La Gobernación de Mérida publicó un comunicado de prensa el 20 de noviembre para anunciar los esfuerzos que realizan para garantizar el combustible. Entre los anuncios dados por el gobernador Jehyson Guzmán destaca el incremento de gandolas operativas, que pasaron de 14 a 24.
Sin embargo, siguen abasteciéndose en la central El Palito y Punta Cardón, aunque están más cerca las de Bajo Grande y San Lorenzo, que lograrían reducir el tiempo de entrega hasta las estaciones de servicio. Frente a esto, según el portal de noticias Comunicación Continua, el gobernador Guzmán declaró: “Estamos trabajando, todos queremos que se resuelva rápido esta situación, pero son meses de trabajo… el esfuerzo que estamos haciendo va a mejorar los niveles de abastecimiento en el estado”.
Con controles y sin soluciones
En junio 2023, el gobierno del estado Mérida implementó un sistema aleatorio y por QR para que los ciudadanos surtieran combustible. Este método, que se basa en un sorteo con el terminal de las placas, aún continúa. Cada mañana, de lunes a sábado, entre las 5:00 a.m. y 6:00 a.m. la cuenta @estadomayordecombustiblemerida publica las estaciones de servicio y número de placa que estarán disponibles para obtener la gasolina.
Sin embargo, no han disminuido las colas ni la dificultad para adquirir el servicio. En el municipio Libertador habilitan alrededor de 12 estaciones: 2 para motos, entre 9 y 10 para carros, donde 3 pueden tener un precio subsidiado, 1 integral (varía el precio dolarizado o subsidiado) y el resto solo en dólares.
En los demás municipios del estado no suelen habilitarse a diario, varía entre Campo Elías, Sucre y Alberto Adriani. Aunque Mérida cuenta con 23 municipios solo surten a 4 semanalmente, según las publicaciones que hacen a diario en la entidad en sus perfiles de Instagram y X (antiguo Twitter).
Marcos Torres, un usuario que se encontraba en la cola en la estación de servicio El Chama del municipio Libertador, afirmó: “Con el sistema solo se puede surtir una vez cada tres días por el registro QR. Además, es una suerte llegar a las 4:00 a.m. rogando que esa bomba salga en el listado. No hay combustible para todos, a las 6:00 a.m. seleccionan a unos 100 carros por estación, ponen el cono y el resto queda por fuera sin disponer del servicio”.
Otro de los sectores más afectados con la escasez de combustible es el agrícola. Pueblo Llano, uno de los mayores productores del país, ha pasado hasta 10 días sin gasolina. Sus pobladores denunciaron, a través de las redes sociales, que tienen que pagar entre 2 y 3 dólares por litro a revendedores para movilizar las cosechas.
Con información de El Pítazo