rino Márquez, sociólogo y asesor de Consultores 21, aseguró que estos niños abandonados serán jóvenes y luego adultos con serios problemas, que en el plano afectivo se evidencian con muchas dificultades, insistiendo en que también se verán las consecuencias de esta negligencia en la falta de lenguaje coherente y de pensamiento abstracto.
«También tendrá problemas para adquirir destrezas en el plano laboral. La violencia juvenil y la delincuencia en general están muy vinculadas a la historia de esos niños maltratados o abandonados» añadió.
Advirtió que el promedio de embarazo adolescente en Venezuela duplica el latinoamericano, recalcando que este está vinculado a la niñez abandonada.
Por su parte, Carlos Trapani, abogado y coordinador general de Cecodap, recordó que el país no tiene cifras oficiales sobre los niños abandonados, haciendo imposible identificar la magnitud del alcance del problema.
«No tenemos datos sobre el sexo más frecuente, la zona, el perfil familiar de quien abandona y cuál es el seguimiento institucional del niño luego de eso» añadió.
Resaltó que hay niños que pueden vivir en la calle y hacen de esta su medio familiar y otros que tienen familia, pero permanecen en la calle durante el día, insistiendo en que en ambas situaciones los niños están en situaciones de riesgo.
Trapani indicó que en los casos que han reportado, se habla de excesos policiales, explotación sexual, abusos, discriminación por parte de comerciantes y rechazo de las comunidades.
«En las calles, los adolescentes consiguen un sistema de relaciones entre ellos. Abonado a esto están las debilidades en el sistema escolar, hemos denunciado el tema de los horarios mosaicos» acotó.
Señaló que con el tema económico también se compromete a los niños, ya que estos deben buscar comer ese día, no esperar a la política pública.
El abogado destacó que este niño tiene derecho a la protección del estado, de la familia y la sociedad, pidiendo no ser indiferentes ante esto.
«Constitucionalmente le corresponde a las alcaldías los programas para la primera y segunda infancia. Hay que notificar a las autoridades más cercanas en el municipio sobre estos niños para buscar establecer un abordaje, el problema es que no se tienen programas suficientes para estos temas sociales» dijo.
Alertó que no hay políticas públicas con intervenciones lógicas y sistemáticas para los niños en estas condiciones de vulnerabilidad.
El coordinador de Cecodap recomendó no dar dinero a estos niños, asegurando que hay organizaciones civiles que se encargan de estos temas, redes comunitarias y con iglesias para ayudarlos con alimentos.
Con información de Mundo.UR