El Dr. Andrés Orsoni, médico neumonólogo y especialista en Medicina Crítica, insistió en el uso del tapabocas como una barrera vigente de prevención no sólo ante los brotes de influenza y casos de covid-19, sino también como barrera de protección en medio de la llegada del polvo del Sahara al país.
En conversación con el Dr. Juan Carlos Álvarez indicó que la picazón de nariz, moco nasal y estornudos son las características típicas de un cuadro de rinitis alérgica que podría presentar una persona ante este fenómeno.
“El polvo del Sahara es una gran acumulación de materiales arenosos que viaja con el viento y además de calima y una masa de aire caliente y seco, puede producir un cuadro importante a nivel del sistema respiratorio y los ojos”, señaló.
Informó que los niños menores de seis años de edad, con o sin enfermedades previas, pueden hacer un cuadro de insuficiencia respiratoria ante la exposición a este polvo.
El médico neumonólogo y especialista en Medicina Crítica, refirió que un paciente asmático que sufra de bronquitis crónica, expuesto al polvo del Sahara, puede llegar a exacerbar su enfermedad de base y acarrear consigo complicaciones de salud como insuficiencia respiratoria, baja saturación y cansancio.
“Ante estos casos, lo más apropiado es consultar con el médico y evaluar comenzar con un antialérgico, esteroides, oxígeno y nebulizaciones para solventar cualquier eventualidad de mayor complicación”, instó.
Con información de La Patilla