Cuidar el cabello es esencial a cualquier edad, pues forma parte de la carta de presentación. Lucir una melena limpia, brillante y saludable es el sueño de todos, sin embargo, en ocasiones esto no es posible.
Por ejemplo, un pelo grasoso o apelmazado resulta incómodo y antiestético, no solo a la vista de los demás, sino quienes lo padecen en carne propio, sufren al no poder peinarse a su gusto.
¿Por qué el cabello luce apelmazado?
La principal causa de que el pelo muestre esa apariencia apelmazada es un exceso de grasa en el cuero cabelludo. También puede deberse al uso de productos cosméticos que no son compatibles con tu tipo de pelo.
Este es un problema capilar muy frecuente sobre todo en aquellas personas con cabello fino y de tendencia grasa.
¿Cómo evitarlo?
Si estás buscando una solución a este apelmazamiento, es indispensable el uso de un champú que regule y controle la sobreproducción de sebo y limpie a profundidad el cuero. Es decir, decídete por un champú para cabello graso, el cual limpia y controla la producción de sebo.
Por otra parte, después del lavado, el cabello debe quedar completamente limpio, libre de restos de productos que puedan provocar que se engrase más rápido de lo habitual.
Otra solución a este apelmazamiento es evitar dejar el acondicionador como si se tratase de un producto sin enjuague, pues suelen estar formulados con otros objetivos, y pueden ser dañinos al dejar en la melena.
Es importante que al lavar el pelo siempre se utilice agua fría porque ayuda a cerrar las cutículas capilares y los poros del cuero cabelludo. Esto es esencial para que el cabello se mantenga lo mejor posible el mayor tiempo posible.
Además, se debe optar por el uso de un cepillo de pala, y cepillar siempre de medios a puntas, evitando empezar en la parte superior de la cabeza. Es clave cepillar mechón por mechón para desenredar el cabello evitando maltratarlo aún más.
Vía Agencias
