La reconocida consultora energética Rystad Energy ha compartido su opinión sobre el panorama actual de la industria petrolera venezolana, que tiene como principal obstáculo la reimposición de sanciones por parte de EEUU.
En una nota recogida por Rigzone, el vicepresidente senior de Rystad Energy, Jorge León, ha compartido su opinión sobre dónde se ubicará la producción de crudo de Venezuela tras la no renovación de la Licencia General Nº 44, que autorizaba transacciones relacionadas con el sector petrolero y gasífero en el país y que expira a finales de mayo después de una extensión de 45 días.
La misma tiene dos puntos de vistas: «en el caso de que no se reimpongan sanciones, nuestra visión actualizada es que la producción aumente de forma constante hasta 1,1 millones de barriles diarios a finales del próximo año», dijo el Sr. León.
Pero añadió: «actualmente se estima que la producción se estabilizará en torno a los 910.000 barriles diarios este año, para bajar moderadamente hasta los 890.000 barriles diarios en 2025».
De esa manera, León esbozó que la última decisión de EEUU en relación con Venezuela tendría un impacto de alrededor de 120.000 barriles por día a finales de 2025, siempre y cuando no se revierta la decisión de reimponer sanciones.
Potencial alcista
Así lo explicó el especialista: «el potencial alcista sigue estando en la posibilidad de que se consideren licencias específicas para continuar las actividades más allá del final del periodo de liquidación (a finales de mayo) o incluso de que se revierta la decisión de reimponer las sanciones».
«Estos dos elementos son especialmente relevantes dado que se aproxima la demanda máxima de verano y faltan pocos meses para las elecciones en EE.UU.», prosiguió León.
El crudo pesado podría escasear para EEUU
Leon señaló que la disponibilidad de crudo pesado de otras fuentes puede resultar un reto para el sistema de refino estadounidense, ya que la escasez del mercado es particularmente aguda en el segmento del crudo agrio pesado.
«El inicio del proyecto de ampliación del oleoducto Trans Mountain, que desviará barriles canadienses de EE.UU. a Asia, es un factor clave de esa escasez», añadió.
«A esto se suma la puesta en marcha de la refinería Olmeca, que podría limitar el suministro de crudo amargo mexicano a EE.UU.», dijo.
«Y otras fuentes regionales más pequeñas, como Ecuador y Colombia, verán disminuir su producción de crudo pesado este año en 24.000 y 13.000 barriles diarios, respectivamente», añadió León.
Puntos claves para la producción de crudo
El experto destaca dos puntos cruciales: «En primer lugar, Chevron, el mayor contribuyente al reciente crecimiento a corto plazo de Venezuela, aún podrá producir y exportar volúmenes a los Estados Unidos bajo la Licencia General N° 41, que se otorgó en noviembre de 2022», dijo.
León agregó que Chevron ya ha alcanzado los 170,000 barriles por día de producción y «apunta a tocar los 200,000 barriles por día a fines de este año», por lo tanto, su actividad sigue siendo relevante.
«En segundo lugar, el departamento de Estados menciona muy explícitamente que considerará las solicitudes de las empresas de licencias especiales para operar en Venezuela más allá del período de reducción».
León señaló que «el destino de las autorizaciones estadounidenses separadas emitidas previamente a Repsol, ENI y Maurel & Prom está por conocerse».
Además, los medios de comunicación citaron a un funcionario de EE.UU. haciendo hincapié en que la decisión de restablecer las sanciones «no debe ser vista como una decisión final de que ya no creemos que Venezuela pueda celebrar elecciones competitivas e inclusivas», explicó León.
Con información de Banca y Negocios
