Las grandes empresas y emprendedores padecen por igual las consecuencias de los apagones que se registran a diario y hasta por 15 horas en el estado andino. Durante este 11 de marzo, los cortes de electricidad mantuvieron negocios y supermercados cerrados, pues a estas fallas se suma la falta de combustible para mantener encendidas las plantas.
Un supermercado ubicado en Las Vegas de Táriba, municipio Cárdenas, cerró sus puertas a las 9:00 a.m., y colgó un anuncio: “Estimados clientes, cerramos porque no tenemos fluido eléctrico, ya que nuestras plantas se encuentran sin gasoil”, se lee en la puerta principal de este negocio, que pertenece a una de las cadenas más grandes del Táchira.
Al mediodía fue cuando se restableció el servicio; sin embargo, a las 3:00 p.m., de nuevo quedaron sin luz y ese apagón se extenderá hasta las 7:00 p.m. Esta es una estimación de la comunidad, que ha hecho su cronograma de apagones a falta de uno oficial.
Emprendedores afectados
También en el centro comercial Santa Teresa, en San Cristóbal, las emprendedoras María Chacín y Clara Hernández cerrarán su local de postres por falta de electricidad para mantener las neveras encendidas y refrigerar los ingredientes y productos ya terminados para la venta.
“La situación es difícil porque necesitamos trabajar, pero no hay cómo. Requerimos luz para las neveras, las batidoras, el horno e iluminación del local. No tenemos nada que ofrecer ni podemos comprar por lo mismo, no podremos refrigerar”, precisó Hernández vía telefónica a El Pitazo.
Aunque tienen una pequeña planta eléctrica, los ingresos que perciben son insuficientes para mantenerla activa por la cantidad de combustible que requiere. Tampoco pueden comprar un inversor eléctrico, que no utiliza gasoil.
