Todo lo que necesitas saber de la micropigmentación de cejas

0
Foto: Archivo

La expresión personal y la estética van cogidas de la mano. Aunque el canon de belleza no siempre ha sido el mismo a lo largo de la historia, lo cierto es que las cejas siempre han cobrado protagonismo a la hora de definir nuestra propia imagen. Hoy en día, son un paso obligado dentro del maquillaje. Sin embargo, dejarlas perfectas requiere de mucha dedicación. Afortunadamente, los avances en cosmética y Medicina Estética han permitido el diseño de una técnica revolucionaria que optimiza la apariencia de las cejas de forma casi permanente: la micropigmentación.

La micropigmentación de cejas es un procedimiento estético en tendencia y con una demanda cada vez mayor, destinado a mejorar la apariencia de las cejas de forma semipermanente, especialmente en personas con cejas despobladas o pérdida de volumen. La técnica debe estar realizada por profesionales cualificados para garantizar la seguridad y el buen resultado del procedimiento, ya que implica la implantación de pigmentos hipoalergénicos en la capa superior de la piel para crear unas cejas naturales y en armonía con el rostro del individuo.

Esta técnica no sólo sirve para mejorar la apariencia estética de forma prolongada en personas con cejas despobladas o con antiguas micropigmentaciones que requieran de un repaso. Además, permite restaurar la apariencia de las cejas en pacientes que las han perdido después de haberse sometido, por ejemplo, a tratamientos médicos. Por lo tanto, la micropigmentación supone un gran paso para mejorar la autoestima de todas las personas que deciden confiar en ella. Los resultados de la micropigmentación de cejas pueden prolongarse hasta 4 años

La micropigmentación es diferente al microblading de cejas. Su principal diferencia radica en la técnica utilizada y el resultado final. La micropigmentación se realiza con una máquina y ofrece resultados más duraderos, ideales para cejas despobladas o para la micropigmentación reconstructiva. En cambio, el microblading se realiza manualmente, creando cejas artificiales más naturales, pero con una duración inferior (de 9 a 12 meses). Ambas técnicas buscan lograr una ceja armoniosa y pueden corregir antiguas micropigmentaciones.

Existen dos tipos de micropigmentación de cejas, en función de las necesidades de cada paciente:

Micropigmentación cualificada: se utiliza para rellenar cejas poco pobladas, definir su forma o incluso crear cejas artificiales para personas que han perdido sus cejas debido a condiciones médicas.
Micropigmentación reconstructiva: es una técnica especializada que se emplea para reconstruir las cejas tras la pérdida de cabello por circunstancias como la alopecia, tratamientos oncológicos o tricotilomanía.

En cualquier caso, durante el procedimiento se aplica pigmento en la piel para simular unas cejas naturales, ofreciendo una alternativa a la cirugía para quienes desean mejorar o restaurar su apariencia. Además, existen técnicas para corregir malas experiencias previas con micropigmentaciones. Por ello, es crucial elegir siempre a profesionales cualificados y con experiencia.

Beneficios de la micropigmentación

La micropigmentación se ha vuelto una solución muy popular por sus numerosos beneficios. La técnica logra una apariencia más definida y completa de las cejas, ofreciendo un resultado muy natural e integrado y recuperando la armonía facial. Por otro lado, constituye una solución ideal para quienes tienen cejas poco pobladas o con áreas sin pelo. En lugar de depender del maquillaje diario, de realizarse un trasplante capilar de cejas o de las cejas artificiales, la micropigmentación es un procedimiento rápido, semipermanente y con muy buenos resultados.

Es personalizable a las demandas de cada persona, ya que permite ajustar la forma, el color y la densidad de las cejas según las preferencias individuales. Asimismo, al ser un procedimiento semipermanente, ofrece la tranquilidad de no tener que preocuparse por las cejas durante varios años. Por todo ello, contribuye a una mejor salud mental de la persona, ya que impacta positivamente en la autoestima con la mejora de la apariencia estética del rostro.

Recomendaciones para el antes y después de la micropigmentación

Antes del procedimiento, es crucial preparar las cejas eliminando cualquier resto de maquillaje, producto o suciedad. Además, se debe evitar la exposición al sol y al bronceado artificial, así como el consumo de alcohol, cafeína y medicamentos anticoagulantes para reducir el riesgo de sangrado durante la micropigmentación. La micropigmentación permite ajustar la forma, el color y la densidad de las cejas

Después de la micropigmentación, mantener la zona limpia y seca es fundamental. Es recomendable evitar tocar las cejas y no aplicar maquillaje durante, al menos, una semana. Tampoco se debería realizar la exposición directa al sol, ir a la piscina o a saunas, recibir tratamientos faciales o practicar actividades que causen sudoración excesiva para preservar la duración y el color de la micropigmentación. En cualquier caso, el especialista en el procedimiento indicará todas las recomendaciones a seguir e incluso podrá indicar el uso de una crema cicatrizante específica para acelerar la curación y mantener la hidratación.

Es importante señalar que, si bien el tiempo de cicatrización tras una pigmentación oscila entre los 7 y 10 días, en realidad el proceso de recuperación puede llevar hasta 6 semanas. Por ello, es fundamental mantener las indicaciones del profesional durante todo este tiempo. Los resultados finales podrán observarse a partir de entonces, que prolongándose nada más y nada menos que durante 4 años.

Con información de Estetic